Tras la fiscalización el lugar quedó con sumario sanitario y una citación al juzgado de policía local
VILLA ALEMANA.- Debido a diversas denuncias realizadas por vecinos y vecinas de Villa Alemana, durante esta jornada equipos de fiscalizadores llegaron hasta la distribuidora de carnes “Austral”, ubicada en Maturana con La Palma, donde se decomisó más de una tonelada de carne en mal estado.
Un hecho que se da a sólo días de las celebraciones de año nuevo donde, en concreto, se retiraron del lugar 1.061,59 kilos de carne, entre vacuno, pollo y embutidos, que se encontraban con fecha de caducidad cumplida o habían perdido la cadena de frío.
Esto fue comentado por la directora de Seguridad Pública de la Municipalidad de Villa Alemana, Carolina Jiménez, quien indicó que “se han registrado distintas denuncias de los vecinos respecto a malos olores, líquidos percolados y algunas carnes que pudiesen estar vencidas”.
Además, hizo un llamado a vecinos y vecinas a “inspeccionar las carnes, ver la fecha de vencimiento, ver visualmente el estado en el cual se encuentran y tener mucho cuidado en los lugares (donde se adquieren los productos) porque la idea es que la compra sea en lugares autorizados y con resolución sanitaria”.
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Distribuidora arriesga 60 millones de multa
Fiscalización que se enmarca en una serie de operativos que realizan de manera conjunta el Municipio con la Delegación presidencial de Marga Marga apropósito de las labores de seguridad en que se trabaja y que se van a seguir desarrollando durante la época estival.
Así lo señaló el delegado presidencial para la provincia de Marga Marga, Fidel Cueto, quien precisó que en “esta fiscalización se logró la destrucción de más de mil kilos de carne que se encontraban vencidas, incluso hace más de dos meses, lo que originó la apertura de un sumario sanitario por parte de la Seremi de salud, arriesgando una multa que puede llegar a las 1000 UTM”.
Además de la infracción antes mencionada, el recinto quedó con una citación al Juzgado de Policía Local de Villa Alemana.
En cuanto a los productos decomisados, estos pasan a un proceso de desnaturalización para posteriormente ser llevados al vertedero municipal. Vale decir que la distribuidora se arriesga a una multa de cerca de 60 millones de pesos, según el Código Sanitario.