En Barranca y Bellavista ya van 15 animales envenenados
SAN FELIPE.- Impactados y asustados están los vecinos del sector de Barranca y Bellavista en San Felipe, al encontrar a sus mascotas muertas y agonizando en el patio de sus casas.
“Lo más terrible fue ver que iban perdiendo el pulso”, relata una de las vecinas afectadas del sector de Barranca, quien pidió a “El Observador” reservar su nombre por miedo a represalias.
Ella misma cuenta que el pasado domingo alrededor de las 8 de la mañana advirtió que sus perros estaban sin vida mientras otros morían. Dice que es la primera vez que una matanza así ocurre dentro de las casas de los vecinos y señala que para los vecinos de la comunidad no hay duda que existen responsables por la muerte de los animales. Hasta ahora, el envenenamiento masivo suma 15 muertes en Barranca y Bellavista.
Como prueba de sus sospechas, esta vecina dice que “tiraron restos de carne con veneno en mi sitio. Antes se veían casos de perros envenenados porque iban a comer animales muertos que arrojan al río, pero ahora fue en mi casa”, aclara.
De hecho, varios hogares amanecieron con trozos de carnes repartidos por los patios o jardines, alimento que creen habría sido el cebo para tentar a los perros a comer.
Uno de los casos fue denunciado, según aseguran, a la Fiscalía de San Felipe. “Realmente es como un sicario de perros”, dice esta vecina que sufrió la pérdida de cuatro de sus mascotas.
Pero a través de un grupo de WhatsApp de la comunidad han conocido nuevos casos de envenenamiento. Y junto con lamentar la partida de sus queridas mascotas, los afectados no dudan que la matanza se hizo para entrar a robar a sus inmuebles.
LOS ENVENENARON
Mariana Bravo, encargada de Tenencia Responsable de la Municipalidad, respalda las denuncias informando que “estos perros fueron envenenados y además de eso se encontraron aves silvestres muertas y moribundas. Encontraron carne con pesticida, hay un informe de un médico veterinario”.
Según la profesional, “los vecinos están muy dolidos y muy tristes porque es un evidente maltrato animal. No eran perros que vivían en la calle, son de casa, son perros que formaban parte de las familias”, dijo.
Bravo agrega que “se le entregó a la junta de vecinos el antídoto (Atropina) para suministrar a los perros que aún estén afectados y se les prestó asesoría de cómo saber cuándo un animal está envenenado y qué hacer”. Algo que no sirve de nada en caso de envenenamiento, dice Bravo, es dar leche a los animales o cortar sus orejas.
“Los vecinos van a poner cámaras, alarmas y no van a permitir que muera ningún perro más”, concluye.
