Existen varios consejos para garantizar la seguridad de los niños cuando están dentro y fuera del agua
INFANCIA.- A cada hora y en cada segundo la supervisión de los padres y adultos es clave para mantener a los menores a salvo de cualquier accidente peligroso. En temporada de verano esta responsabilidad crece, sobre todo cuando se quiere disfrutar en familia de centros turísticos que cuentan con piscina para el público, o bien, cuando darse un “chapuzón” en la piscina de la casa es el mejor panorama.
Para prevenir tragedias que puedan involucrar a nuestros hijos o hijas, es importante considerar y estar atentos y atentas a algunos detalles, como no relajarnos si vemos que la piscina tiene poca profundidad, pues aún así significa un peligro para los menores; asegurarnos unos meses antes que los niños y niñas tomen clases de natación como medida de iniciación en el agua.
Asimismo, y según aconsejó Red Salud, es importante tener en cuenta que si queremos tener piscinas en casas debemos contar con todas las medidas de seguridad para la prevención: cercas de altura, cubre piscinas, juguetes inflables y, por supuesto, la vigilancia permanente.
En cuanto a disfrutar en espacios públicos que tengan piscinas, los padres no solo deben autoexigirse estar atentos en todo momento, sino que también deben exigir que el recinto cuente con los elementos mínimos de seguridad, como tener personal de vigilancia y reanimación, que sean profesionales entrenados para esa labor; la debida señalización de seguridad e indicaciones claras; material antideslizante para evitar caídas; y que la limpieza del agua se encuentre en norma. En este caso el pH debe estar regulado entre 7,2 y el 7,6 para evitar que los niños puedan sufrir irritación en la piel y los ojos.
