Se dan las condiciones jurídicas para poder intervenir el río.
SAN FELIPE.- Hoy jueves, a las 16:45 horas, el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, firmó un nuevo decreto de Escasez Hídrica, que en esta oportunidad abarca las comunas de San Felipe, Santa María, Catemu, Panquehue; en la Provincia de San Felipe; y la comuna de Los Andes, en la provincia del mismo nombre.
Este decreto se da luego de que el 5 de enero se decretara la misma condición para las provincias de Quillota, Marga Marga y Petorca; además de las comunas de Puchuncaví, Concón y San Antonio. Junto con ellas, un segundo decreto ya había sumado recientemente a la comuna de Putaendo.
Esta situación se da en medio de las discusiones que se han dado entre representantes de las secciones tercera (Quillota) y Cuarta (Marga Marga) con sus pares de la Primera (Los Andes) y Segunda (San Felipe), que ha impedido la materialización de un acuerdo para redistribuir las aguas del río Aconcagua, considerando el bajísimo volumen del recurso desde Romeral, en Hijuelas, hacia la costa.
Ante el escenario de conflicto, Agricultores de Quillota y Marga Marga han pedido que el Ministerio de Obras Públicas intervenga el río, quitando temporalmente las facultades de administración del agua a las Juntas de Vigilancia, para permitir la llegada de recurso para el riego en sus predios, desde la zona alta del afluente.
La firma del decreto de hoy genera, justamente, las condiciones jurídicas para una eventual intervención, dada la falta de acuerdo entre las Juntas de Vigilancia, pues el Código de Aguas da facultades a la DGA para intervenir sólo si se ha decretado escasez en cada una de las partes en que está dividido el afluente.
El documento firmado hoy suma territorios de las provincias de San Felipe y Los Andes, dejando en condición de Escasez Hídrica a comunas de todas las secciones del Aconcagua, sumando el decreto del 5 de enero y el de hoy jueves 1 de febrero.
De esta manera, la Dirección General de Aguas tendría facultades para tomar en sus manos, excepcionalmente, algunas o todas las atribuciones que corresponden a las Juntas de Vigilancia de cada sección.
Pero la intervención no es el único camino, pues la Reforma al Código de Aguas da otra salida.
Según explicó en exclusiva a El Observador el director general de Aguas, Carlos Estévez, podría sacar una resolución para que la Primera Sección libere volúmenes de agua al día, que, de no cumplirse, dejaría a la organización expuesta a sanciones que pueden alcanzar las 500 UTM.-
Si esto no es suficiente, la DGA está preparada para intervenir el río, aunque –según señala el director de la citada dirección nacional- “no es la idea llegar a esta situación, porque, así como se dio en el 2014-2015, están las condiciones dadas para llegar a un acuerdo”.
“Nos interesa que haya una actitud proactiva al respecto, porque aquí hay gente de la tercera sección que la está pasando muy mal y en consecuencia corresponde que, quienes comparten un recurso, tomen acciones lo más cercanas posibles a una mirada en conjunto de la cuenca”, dijo el director de la DGA a El Observador.
Detalle del plan de la DGA, se puede conocer en una entrevista exclusiva que aparece en las ediciones impresas de El Observador y El Observador de Aconcagua.
