En 1995 nació como la Red de Emergencia Integral REI-131 del SSVSA para transformarse durante el 2010 en el modelo nacional conocido como SAMU, Servicio de Atención Médico de Urgencia,
VALPARAÍSO.- 25 años de vital servicio cumplió el sistema de atención prehospitalario de Valparaíso que en un comienzo inició como la Red de Emergencia Integral REI-131 del Servicio de Salud Valparaíso San Antonio para convertirse en el año 2010 en el conocido SAMU (Servicio de Atención Médica de Urgencia) que recorre la ciudad completa con su flota de ambulancias para atender los requerimientos de salud de los porteños porteñas y de cualquier persona que se encuentre con dificultades que pongan en peligro su salud.
En el día de su aniversario, el jefe del SAMU del Hospital Carlos van Buren, enfermero Andrés Schuler, rememoró los orígenes de la atención fuera de las dependencias del centro asistencial porteño y relató que “nuestra unidad deriva desde el sistema prehospitalario Red de Emergencia Integral REI-131 del SSVSA, que nace en 1995 al alero de la Unidad de Emergencia Adultos del Hospital Van Buren. En 2010 se avanza hacia el modelo prehospitalario nacional SAMU, inaugurando las actuales dependencias, donde se establece un centro regulador de llamadas y base de ambulancias, separándose físicamente de la unidad de emergencia; con ello se puso énfasis en aplicar las directrices nacionales de gestión y atención prehospitalaria”.
El profesional de urgencia detalló que “desde los inicios de nuestro centro se avanzó en infraestructura, contando en la actualidad con una planta de 300 metros ², un centro regulador, personal idóneo y flota de móviles para disponer de 5 ambulancias en servicio 24/7. Como también de equipamiento médico e insumos acorde a las necesidades de atención, Todo lo anterior permite dar cobertura no solo a la atención pre hospitalaria sino también incluir los servicios de traslados de pacientes críticos o mayor complejidad, permitiendo el acceso de pacientes a servicios de UCI en hospitales o clínicas de la red cuando nuestro hospital no dispone de cama critica; esto en los ámbitos neonatal, pediátrico y adulto”.
Con respecto a las fortalezas que el enfermero jefe destaca del servicio, comentó que “nuestro servicio cuenta con la calidad técnica y humana de las personas que cumplen su trabajo como especialistas en el ámbito prehospitalario, lo que otorga seguridad y confianza a nuestra comunidad”.
ATENCIÓN EN TIEMPOS DE PANDEMIA
La contingencia sanitaria, sin duda, ha significado enfrentar nuevos desafíos en todos los ámbitos del quehacer humano y la atención prehospitalaria no es la excepción, en ese sentido, Andrés Schuler, destacó que “enfrentar el trabajo SAMU en tiempos de Pandemia ha significado un replanteamiento de los procesos internos como externos de atención. En los aspectos internos se efectuaron redistribución física de las dependencias para mantener distanciamiento social, incorporar el uso de mascarillas de manera estricta, etc. En los procesos de atención se incorporó pesquisa de casos o entornos de sospecha COVID desde la recepción de las llamadas telefónicas de urgencia, notificación a personal samu para uso de EPP y los procesos de aseo y desinfección de ambulancias recurrentes; lo que ha llevado a modificación de la gestión de la flota de ambulancias y en los tiempos de respuesta, ya que se enfatiza en la seguridad para paciente y funcionarios”.
Christopher Adarme, es enfermero del SAMU, próximo cumplir 10 años, tiene 35 años y a los 25 comenzó a trabajar inicialmente en la urgencia del hospital y en el intensivo, después de un año pasó al SAMU, con toda esa experiencia acumulada, el profesional comentó que “es un trabajo bien enriquecedor, en el sentido que requiere harta vocación y tiene aspectos de mucho servicio social, en ese sentido, es bien enriquecedor como profesión”.
Sin embargo, el profesional del cuidado reconoce que muchas situaciones han marcado su vida, quien dijo que “siempre hay algunas experiencias de emergencias que van quedando ahí en la memoria, que generan más emotividad que otras, probablemente, accidentes de múltiples víctimas en donde hemos tenido que atender muchos pacientes en simultáneo, donde han sobrepasado la capacidad que hemos podido tener para poder atender, el derrumbe del año pasado en Valparaíso, la caída de unos chicos en el Paseo Atkinson, la verdad es que me han tocado la mayoría de las emergencias grandes acá en Valparaíso, estando de turno, los incendios grandes de la ciudad también me han tocado estar de turno y que también han sido experiencias bien fuertes”.