Se dio por acreditado que el imputado golpeó repetidas veces con un palo a un conocido hombre que vivía en situación de calle, provocándole la muerte en el año 2022.
QUILLOTA.- El Tribunal Oral en lo Penal de Quillota dio a conocer la condena contra Álvaro Enrique Torres Leiva, un hombre que actualmente tiene 40 años y que la justicia consideró culpable de la muerte de Juan Carlos Cortés Bravo, conocido como el “Pistola”.
“Pistolita”, como lo apodaron cariñosamente los vecinos quillotanos, tenía 44 años, vivía en situación de calle y fue asesinado brutalmente el día 15 de noviembre de 2022. El hecho ocurrió en la vía pública en la calle Presidente Ibáñez, dentro del sector de Aconcagua Sur.
Lo golpearon varias veces con un objeto contundente y lamentablemente, falleció luego de no resistir la gravedad de sus lesiones. Era oriundo de Antofagasta y había llegado a vivir a Quillota unos cuatro años antes del crimen que terminó con su vida.
Unos días después del cruel hecho, los detectives de la Brigada de Homicidios Valparaíso, de la PDI, detuvieron al presunto autor del homicidio, quien es la misma persona que ahora fue condenada por la justicia penal.
VER TAMBIÉN: Prisión preventiva para detenido por homicidio de hombre en Quillota
Fatal agresión con ensañamiento
Las pruebas presentadas por la Fiscalía, como la declaración testigos, peritos, documentos, peritajes científicos, entre otros, convencieron al Tribunal Oral en lo Penal de la culpabilidad de Álvaro Torres Leiva en calidad de autor de homicidio calificado.
“Alrededor de las 18 horas, el acusado Álvaro Enrique Torres Leiva, se dirigió donde se encontraba la víctima, persona indigente del sector y premunido de un elemento contundente tipo ‘palo’, le propinó con ánimo de matar, múltiples golpes a la víctima en diversas partes de su cuerpo, principalmente en zona superior de su cuerpo, a nivel del tórax, producto de lo cual la víctima cae tendido en la vía pública, continuando con los golpes cuando la víctima se encontraba en el suelo, falleciendo esta en el lugar producto de la acción del acusado. Luego de lo anterior, el acusado abandonó el lugar, dejando en el mismo, el elemento utilizado para matar a la víctima”, expuso durante el juicio el Fiscal Jefe de Quillota, César Astudillo.
Para la Fiscalía, el acusado actuó sobre seguro para agredir a la víctima y además hubo un aumento deliberado del dolor, dos calificantes de alevosía y ensañamiento, que expuso el persecutor.
“La víctima era indigente, notoriamente inferior en capacidad física para responder a una agresión injustificada, una muerte dada a palos, no hay otra arma que un trozo de madera que fue usado al punto de quedar con lesiones en su mano el autor. Acomete a la víctima porque una piedra golpeó su auto. En una reacción desproporcionada se dirige a la víctima débil, mal nutrida, no conforme con los golpes, toma un elemento de madera y le propina golpes”, explicó el Fiscal durante el juicio.
Condena efectiva de 15 años y un día
La Sala del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Quillota, integrada por los jueces titulares Lino Godoy Órdenes, quien presidió, Mónica Oliva Rybertt e Ivonne Francisca Cortés Mora, condenó al acusado a la pena de 15 años y un día de presidio mayor en su grado máximo, más las accesorias legales.
El imputado, que tenía 38 años al momento en que cometió el crimen, deberá cumplir la condena de forma efectiva.
“Si bien no compartimos la pena, por haber aplicado el mínimo el Tribunal, quiero destacar la prueba de cargo incluida en el juicio, la que incluyó pruebas genéticas de ADN y testigos reservados, que pudieron acreditar un homicidio calificado y condenar a su autor”, señaló el Fiscal Jefe de Quillota tras conocer la sentencia.