Más de ocho mil personas participaron en su elaboración.
MIRADA UNIVERSITARIA.- Desde esta semana, la PUCV cuenta con una nueva carta de navegación que fijará los destinos de la Institución por los próximos años. Con un Salón de Honor lleno, la asistencia de autoridades y representantes de los diversos estamentos que conforman la Casa de Estudios: académicos, funcionarios y estudiantes, se presentó el Plan de Desarrollo Estratégico Institucional 2023-2029.
En este trascendental periodo, la Católica de Valparaíso conmemorará su primer centenario en 2028 y tendrá que renovar su acreditación por siete años que la sitúa como una de las mejores cinco universidades del país. Al respecto, el rector Nelson Vásquez, advirtió que la Institución cuenta con una experiencia amplia, luego de enfrentar cinco procesos de planificación estratégica que partieron en la década de los años 90, pasando después por diversas administraciones.
“A través de este documento, nos hacemos cargo de los desafíos actuales y futuros en el contexto nacional e internacional de la Educación Superior. Este diagnóstico estratégico contó al comienzo con la asesoría de investigadores extranjeros, lo que fue clave para bosquejar y aprobar los nueve lineamientos institucionales. A través de la planificación estratégica hemos aprendido mucho y gracias a eso se ha fortalecido la gobernanza, el desarrollo institucional y el crecimiento de la Universidad”, añadió.
Por su parte, el vicerrector de Desarrollo de la PUCV, Jorge Mendoza, quien estuvo a cargo de liderar este proceso, destacó que el plan comenzó a esbozarse en septiembre de 2022, luego se efectuó un claustro pleno extraordinario para cambiar la visión de la Universidad y más de 8 mil personas participaron en la elaboración de este plan, lo que es una muestra de la importancia que tiene la planificación para su comunidad.
“Con este documento esperamos avanzar en los grandes desafíos que tenemos como Institución, que está pronta a cumplir su centenario y esperamos incorporar aquellos aspectos que son claves para abordar la realidad actual, entre ellos la incorporación de las tecnologías, la inclusión y la equidad, temáticas sociales que son muy importantes para la región, el país y el mundo”, expresó.
El texto fue presentado por el presidente de la Comisión de Desarrollo del Consejo Superior y académico de la Facultad Eclesiástica de Teología, Juan Pablo Faúndez, quien añadió que “el ejercicio de compendiar y proyectar este nuevo plan debería hacernos sentir que somos herederos de un valioso legado, que asume el relevo de generaciones que han contribuido a la edificación de esta gran obra al servicio y la dignidad de la persona humana y el bien común (…) La PUCV enfrenta esta nueva etapa consciente de su misión en el contexto nacional y del progresivo impacto que seguirá alcanzando en el ámbito internacional en su clara proyección del rol social”.
Al término de la ceremonia, que se transmitió en vivo por el canal de Youtube de la Universidad, se hizo entrega del plan a los decanos, decanas y representantes de las distintas facultades, así como también al presidente y presidenta de los sindicatos junto a la presidenta de la Federación de Estudiantes de la casa de estudios, quienes tendrán la misión de plasmar este plan a toda la comunidad.
Las novedades del plan
Elizabeth Montoya, secretaria de la Facultad de Ciencias y académica del Instituto de Matemáticas, valoró este texto que representa una nueva ruta para la PUCV. “Este es un documento muy importante. Se desprenden lineamientos donde cada Unidad Académica se compromete a avanzar durante los próximos años. Como novedad se incluye el ámbito de las tecnologías y la internacionalización, énfasis que deben abordarse y que se tienen que consolidar por medio de un plan de acción”, complementó.
Juan-Eugenio Álvaro, director de la Escuela de Agronomía, reflexionó que “este texto es un faro y es valioso para nosotros, pues nos permite desarrollar mejor las actividades académicas. Tanto los funcionarios como los estudiantes de la PUCV deben conocer y colaborar para llegar a las metas que nos comprometeremos a través de los planes de concordancia”.
Por su parte, Osvaldo León, presidente del Sindicato Interempresas N°1 de funcionarios de la PUCV, añadió que la Universidad enfrenta una serie de nuevos desafíos en el contexto de la educación superior. “Este plan 2023-2029 significa consolidar nuestro proceso de acreditación como una de las cinco mejores universidades del país, lo que deja también una serie de metas para el mundo sindical. Los trabajadores administrativos y de servicio tenemos un compromiso de vida con nuestra Universidad”, apuntó.
La presidenta del Sindicato Alberto Hurtado, Zahamara Aciares, expresó que “el Plan de Desarrollo Estratégico marca un hito para la Universidad y toda su comunidad. Como organización venimos trabajando hace tiempo para colaborar desde nuestra mirada. Estamos contentos que se haya presentado este documento y esperamos que se pueda concretar a cabalidad de aquí al 2029”.
La presidenta de la Federación de Estudiantes de la PUCV, Javiera Carlesi, indicó que “los estudiantes son parte integral del quehacer de la Universidad y es fundamental que podamos contribuir a la socialización de este proceso. Respecto a cómo influye en el contexto estudiantil, es fundamental porque se incluye el desarrollo de nuestras carreras académicas y también de nuestra participación en la vida universitaria. Rescatamos la inclusión y la incorporación de la equidad de género sobre todo en las carreras STEM”.
SOBRE EL DOCUMENTO
El nuevo Plan de Desarrollo Estratégico Institucional 2023-2029 incluye nueve lineamientos y 21 objetivos estratégicos.
Los lineamientos son: identidad institucional como desafío permanente; investigación, creación e innovación con impacto en la sociedad; formación integral, pertinente e innovadora para la transformación de las personas; vinculación con el medio como agente de diálogo con la sociedad; gobernanza institucional para una gestión transformadora; aseguramiento de la calidad y compromiso con la excelencia; equidad e inclusión para una convivencia y participación plena; internacionalización para la integración en una sociedad global; y tecnologías al servicio del desarrollo de las personas en el siglo XXI.