“Si los padres trabajan y le encargan la educación de sus hijos al computador, ¿cómo se manejan las emociones?”, cuestiona el profesional cubano, ante la realidad de los menores
SAN FELIPE.- Alejandro Barroso Martínez es un psicólogo cubano egresado de la Universidad de la Habana en el 2010. Tiene una maestría en Comunicación en la Universidad de Guadalajara (México) y actualmente está a punto de culminar su doctorado en Ciencias de Salud Colectiva, en la Universidad Autónoma Metropolitana de Ciudad de México.
El destacado profesional está de visita en San Felipe, invitado por la Universidad de Valparaíso, para dictar una charla sobre bullying, tema que ha estado en la palestra a nivel local y nacional en el último tiempo.
La cita en el Teatro Municipal es el próximo lunes 11, a las 18 horas, con entrada totalmente liberada. Por la relevancia del expositor, se espera la presencia de directores de establecimientos educacionales, docentes, profesionales del sector y de otros ámbitos como la salud, además de la comunidad en general.
MANEJO DE LAS EMOCIONES
La charla, según explicó el propio Alejandro Barroso a “El Observador”, tiene por objetivo orientar sobre el tema del acoso escolar y ayudar a generar conciencia sobre los alcances que tiene cuando lamentablemente ocurre. Pero también, explicar por por qué se produce y cuáles son algunos de los mecanismos para apoyar tanto al alumno que es víctima como al estudiante que comete el bullying. Esta fue nuestra conversación con el destacado psicólogo cubano.
- Doctor Barroso ¿partamos por entender qué es el bullying?
“Se puede entender por todo aquel comportamiento que se ejerce de manera directa o indirecta sobre otro, con el fin de causarle un daño físico o emocional, y que puede acontecer o ejecutarse a través de la extorción, la amenaza, intimidación o el daño físico directo, y que esto ocurra de manera sistemática y sostenida en el tiempo. Eso lo diferencia de un acto de violencia aislado”.
- ¿Qué lleva a un menor a convertirse en victimario, acosador o abusador?
“Es importante que se diferencien las condiciones que componen el ejercicio del bullying a los determinantes sociales. Cuando un niño o niña es más grande que el otro, cuando es más fuerte, cuando tiene más edad o es más autosuficiente, eso puede provocar de manera sistemática burlas, acoso, extorción, intimidación, amenazas, agresión física directa, intento de desprestigio de la imagen del otro. Esas son condiciones que generan y viabilizan esas condiciones. Lo que dicen las investigaciones en términos de las verdaderas causas del por qué algunos se convierten en víctimas y otros en victimarios tiene que ver con el mal manejo de las frustraciones, mal manejo de la ansiedad, no reconocimiento de la depresión, y no solo del joven en sí, sino que también de la familia”.
LA IMPORTANCIA DEL HOGAR
- En ese sentido, entonces ese tipo de conductas provienen del hogar…
“Claro. Nos podemos preguntar: ¿si los padres están poco tiempo con los muchachos, si trabajan 12 horas al día y le encargan la educación de niño o niña al computador, entonces, cómo se manejan las emociones? ¿Por qué se ha quedado el menor a cargo de sí mismo?¿Qué tipo de empatía estamos construyendo cuando el niño o niña está solo frente a la pantalla, solo con sus propias emociones y no sabe cómo manejarlo y tampoco tiene a quién decirlo?”.
- Es decir que el manejo de la emociones es relevante…
“La forma en qué se manejan las emociones en la familia, la forma en que se toman las decisiones, la forma en la que se castiga lo mal hecho pero no se premia lo bien hecho, la forma en la que reconocemos al otro con cosas vitales y que están dadas principalmente en la familia”.
- ¿Cómo alguien puede darse cuenta que un menor es víctima de bullying, teniendo en cuenta además que hoy se da la figura del ciberbullying”?
El caso del ciberbullying es un campo de estudio actual. Estar detrás de un teléfono o de un perfil de una red social permite a muchas personas hacer cosas que en un contexto cara a cara no podría. Es importante decir que lo que caracteriza el bullying son agresiones verbal o física, ya sea directa o indirecta, ya sea un desprestigio o dejar correr un rumor para hacer daño, por ejemplo. Lo que caracteriza específicamente al acoso en el ámbito de la escuela es que se trata de un comportamiento reiterado y sistemático en el tiempo, que se dirige a causar daño físico, emocional o directo hacia la persona pero que puede provenir de una persona así como también de un grupo”.
- ¿Existen señales?
“Sí. El menor, por ejemplo, cuando está siendo acosado en el ámbito de la escuela, no quiere ir, baja su rendimiento, tiene problemas a la hora de dormir, no se puede concentrar. El estudiante rechaza cosas que antes no, por ejemplo. Si hablamos del espacio del ciberbullying, el menor rechaza la pantalla y también podemos notar cambios en los afectos una vez que cerró el perfil. En la parte del victimario también, cuando el niño o niña crea varios perfiles, cuando comienza a gastar más tiempo de lo habitual en la pantalla, cuando el menor expresa sus emociones a través de un perfil y de un discurso mediático, es un menor al cual podemos presumir que está siendo victimario o acosador”.
- ¿Qué puede esperar el asistente a la presentación del lunes en San Felipe?
“Los ejes que van conducir la presentación estarán centrados en responder interrogantes. ¿Qué es acoso? ¿Qué es bullying? ¿Cómo se pueden identificar algunas señales o alarmas en nuestros hijos e hijas? ¿Qué estrategias concretas podemos utilizar tanto los que sufren bullying y qué estrategias pueden llevar a cabo los profesores para trabajar con la víctima pero también con el agresor, su familia y el entorno?
- ¿El bullying está supeditado solo a la escuela?
“Está enfocado en el acoso escolar, pero que no significa que esto ocurra sólo en el ámbito de la escuela. Hoy se vive en este ámbito y es ahí además donde se da la oportunidad de trabajar con los profesores, pero el hecho que no se reduzca al ámbito escolar solamente el tema del acoso, da también para trabajar en otras determinaciones sociales, como por ejemplo la familia”.