Fue diagnosticada con un Neuroblastoma Abdominal hace dos años y la mejor forma de hacerle frente a esta enfermedad es a través de dicho procedimiento
VIÑA DEL MAR.- Valentina Moraga Pavez tiene 12 años, vive en Forestal y cursa sexto básico en el Liceo Inmaculada Lourdes. Es amante de los videojuegos y le encanta escuchar K-pop, siendo uno de sus sueños poder viajar a Corea del Sur, la cuna de este estilo musical. Sin embargo, su vida tuvo un giro inesperado cuando, hace dos años, le diagnosticaron un Neuroblastoma Abdominal en etapa 4.
Este tipo de cáncer, de acuerdo al sitio web de la Red de Salud UC Christus, es un tumor maligno que se origina en el tejido nervioso y se presenta en bebés y en niños. De acuerdo a este mismo centro médico, los tratamientos más comunes son las quimioterapias y la radiación. Sin embargo, para Valentina existe otra alternativa que podría ayudarle a vencer esta enfermedad.
Así lo reconoció su madre, Carolina Pavez, quien manifestó que la idea es realizarle un autotrasplante de médula ósea. Esta intervención consiste en extraer células madre de su cuerpo, pasar por un proceso de quimioterapias para eliminar los vestigios del cáncer presentes en la médula y, posteriormente, introducir las células madre sanas en su cuerpo.
Carolina manifestó que “lamentablemente debe ser en el sector privado, por lo que haremos lo que sea para juntar los 60 millones de pesos que cuesta la operación, un monto que no es menor para nosotros”. Sin embargo, para la familia esta posibilidad es una esperanza para que Valentina pueda sanar por completo.
Y pese a las dificultades que han atravesado, Carolina comentó que su hija se ha mantenido fuerte, destacando que “es una niña empática, cariñosa y que a su corta edad es muy madura, tanto que en ocasiones es ella quien ha tenido que levantar mi ánimo, lo que me sorprende porque, a veces, los niños no dimensionan lo que está sucediendo”.
COMIENZOS DE LA ENFERMEDAD
Cuando tenía 10 años, Valentina fue diagnosticada con tres tumores en diferentes partes del cuerpo: cabeza, médula y abdomen, siendo este último el más complejo ya que venía con metástasis, aunque logró ser controlado a tiempo. Desde el Hospital de Quilpué, lugar donde le detectaron la enfermedad, fue trasladada al “Gustavo Fricke” de Viña del Mar, ingresando al área de Oncología.
Debido a la gravedad de su cuadro, las expectativas de vida eran de apenas un 2%. Sin embargo, su tenacidad le ha permitido superar varios obstáculos. De hecho, durante los primeros cuatro meses, logró la recuperación de los tumores de la cabeza y médula, quedando sólo el Neuroblastoma Abdominal. Y esto fue posible gracias a la quimioterapia, lo que aumentó sus posibilidades de vida.
Luego fue derivada al Hospital Luis Calvo Mackenna de Santiago, donde se dieron cuenta que Valentina tenía un 40% de células cancerígenas en su médula. Y según la información que se le entregó Carolina, madre de la menor, ella no debía presentar indicios de cáncer en esta área para realizar la operación en su abdomen en dicho hospital. Por lo tanto, se dirigieron hasta la Clínica Red Salud Christus, donde encontraron esperanzas.
LUKATÓN PARA VALITA
De acuerdo a Carolina Pavez, en el recinto de salud le dijeron que tener un 40% de células cancerígenas no afectaría el procedimiento si se realizaba un trasplante, siendo la única alternativa viable hasta el momento. Eso sí, ésta tiene un alto costo que alcanza los 60 millones de pesos. Sin embargo, es una posibilidad cierta para vencer al cáncer.
Finalmente, pese al alto monto que debe reunir la familia para concretar la operación de Valentina, su madre no pierde la esperanza. Por lo mismo, manifestó que realizarán diversas actividades solidarias para recaudar el dinero y así mantener viva la ilusión de mejorar la calidad de vida de una niña con un largo camino por delante.
La campaña consiste en reunir recursos a través de la donación de mil pesos, a fin de recolectar la mayor cantidad de dinero posible que permita realizar la operación. Si bien no hay fecha estimada, el tiempo corre en contra de la menor. Por eso, quienes deseen colaborar podrán hacerlo a la siguiente cuenta: Carolina Pavez Hidalgo, RUT 17.434.263-6, Cuenta Corriente 0-000-81-25768-0, Banco Santander.