A punto de cumplir los 87 años sigue activo y lamenta los terribles acontecimientos que hoy vive la Iglesia
LA CALERA.- Una doble celebración vivirá en estos días el padre Pedro Aguiar Darrouy, ex párroco del Templo “Santo Nombre de Jesús”, quien hoy sábado cumple 62 años de sacerdocio y, además, el 31 celebrará 87 años de vida.
Nacido en 1931, en la localidad de Maipo, con sólo 12 años de edad- ingresó al Seminario Menor de los Santos Custodios de Santiago, a cursar el 1° año de Humanidades, obteniendo su vestimenta religiosa en 1946, realizando sus estudios de Filosofía en el Seminario y los de Teología en la Universidad Católica.
Fue el 4 de marzo de 1990 cuando, monseñor Francisco de Borja Valenzuela Ríos, obispo de Valparaíso, destinó al padre Pedro como párroco de la Iglesia “Santo Nombre de Jesús” de La Calera, donde estuvo hasta abril de 2014, realizando por casi 25 años una labor muy reconocida. A pesar de que ya no tiene ese puesto, sigue realizando actividades sociales con las comunidades, ofreciendo misas, liturgias y campañas solidarias.
El querido padre señala estar “contento, sobre todo porque estoy sano, trato de estar siempre activo, me gusta estar con la gente y ver cómo ha crecido la comuna y sus avances, por ejemplo, los arreglos en el centro del que muchos se quejan pero hay que promover el uso de las ciclovías. Este es un cambio cultural al que no estamos acostumbrados”.
“Esta es una ciudad solidaria por naturaleza y no se deben olvidar de eso, acá no hay diferencia de clases, es una ciudad cálida, familiar y fraterna, debemos conservar eso”, dice el padre.
Ante los problemas que ha vivido la iglesia católica, el padre señala que “debemos trabajar por un país más positivo, ser más comprensivos, los problemas hay que tratarlos pero no darle con lo mismo siempre, pediría que sepamos convivir con más alegría no tergiversar ni ocultar las cosas, pero que no nos quedemos en la oscuridad, eso me entristece mucho”, explica.
Finalmente asegura que celebrará su cumpleaños en su casa, recibiendo a quienes lo quieran ir a saludar. “Lo único que quiero es no morirme antes que esté listo el estadio de La Calera, soy un hincha del equipo y no me pierdo los partidos, sobre todo ahora que nos han dado tanta alegría”, dice entre risas.
