Hecho ocurrió en septiembre del año pasado y desde entonces estaban en prisión preventiva
OLMUÉ.- En septiembre del año pasado, en Lo Narváez, ocurrió un asesinato en la vía pública que aún es recordado por los vecinos del sector. El hecho en un principio no fue del todo claro, pero tras 7 meses de investigación, la justicia determinó a los culpables del caso.
El hecho ocurrió el domingo 24 de septiembre en la calle Toribio González. Jorge Lazo Lazo, de 25 años y residente del sector, se encontró con Marco Espinoza, de 17 años, quien vivía en el Hogar El Pino del Sename en Quillota y que ese fin de semana estaba en sus días libres.
Por razones que se desconocen, ambos comenzaron una discusión que terminó en una pelea. Lazo intentó huir hasta su casa, sin embargo, Espinoza lo alcanzó y la pelea continuó, con la participación del tío del menor de edad, Francisco Pizarro Ponce de 44 años, quien también comenzó a atacar a Jorge Lazo.
Al ver lo que ocurría, Jorge Lazo Jorquera -padre de Jorge Lazo Lazo- se sumó portando una pala para defender a su hijo. Pero, de inmediato Francisco Pizarro se la quitó y, con la misma, le pegó en la cabeza causándole una herida.
Así fue como la riña fue subiendo su nivel de violencia, y Jorge Lazo Lazo sacó un cuchillo que portaba propinándole dos puñaladas en el tórax a Marco Espinoza, para luego abalanzarse contra el tío, Francisco Pizarro, propinándole dos puñaladas. En tanto su padre le pegó al menor con la pala en la cabeza, dejándolo herido, para luego huir del lugar.
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Marco Espinoza resultó con graves heridas, perdiendo la vida minutos más tarde, mientras que su tío pudo salvarse. Al enterarse de este trágico final, Jorge Lazo Lazo y Jorge Lazo Jorquera se entregaron a la PDI de Limache a la mañana siguiente. Desde ese día quedaron en prisión preventiva.
PADRE FUE ABSUELTO
Tras la investigación, los jueces del Tribunal Oral en Lo Penal de Quillota Danko Koscina Villegas, María Ríos Latham y Andrea Santander Guerra, decidió por unanimidad absolver del delito de homicidio a Jorge Lazo padre, pues se estimó que él no tuvo ninguna injerencia en la muerte del joven de 17 años. A pesar de que la Fiscalía aseguraba que el golpe con la pala terminó de asesinar a Marco, finalmente las pericias determinaron que él nunca agredió al joven.
En tanto, Jorge Lazo Lazo, fue condenado como autor del homicidio, sin embargo, las atenuantes consideradas determinaron que la pena de cárcel fuera sustituida por pena de libertad vigilada intensiva por cuatro años y sesenta días.
De esta manera, ambos imputados quedaron en libertad luego de casi siete meses en prisión preventiva, terminando con uno de los casos más estremecedores del último tiempo en Olmué.