Ninguna figura es imposible de representar para ellas. Ni Groot de “Los Guardianes de la Galaxia”, ni la mítica Misato de “Evangelion”. la administradora Elizabeth Molina (Viña del Mar) y la enfermera Carolina Mora (El Belloto) son todas unas artesanas al momento de elaborar sus trajes y cuentan a Reportaje PM de Observador.cl cómo es el proceso de creación.
Para muchos puede ser un simple hobby, pero para quienes están en el mundo del cosplay esta actividad es un arte que requiere de una minuciosa preparación y perfeccionamiento desarrollado con los años.
Este Reportaje PM a las puertas del fin de semana, se adentra de lleno al mundo del Cosplay, desde la rutina de dos jóvenes de Viña del Mar y Quilpué, Elizabeth y Carolina, quienes nos cuentan cómo se hace para traer a personajes de ficción a la vida real.
Partamos por lo básico: ¿Qué es el Cosplay?
Es importante saber qué significa “Cosplay”. Este concepto nace de dos palabras: “constume and play”, que en su traducción al español significa disfrazarse y jugar. Fue acuñado en 1984 por el japonés Nobuyuki Takahashi, el fundador de la editorial Studio Hard.
El nipón asistió a una Convención de Ciencia Ficción en Estados Unidos, lugar en el que observó con asombro a quienes llegaron disfrazados de sus personajes favoritos. En ese instante los apodó como “cosplayers” (personas que hacen cosplay).
Sin embargo, este arte surgió en la década de los 30, en Estados Unidos, cuando una pareja fue disfrazada a la primera Convención de Ciencia Ficción, en la que vistieron un atuendo basado en la película Thing to Come, dirigida por William Cameron.
La idea del cosplay es que las personas puedan personificar y/o actuar (porque no es solo el traje, ya que deben estudiar a fondo cada gesto y palabra de referencia), a sus ídolos de comics, video juegos, películas y animación japonesa, para mostrarlos en eventos y así compartir la emoción con sus pares. También se hacen grandes concursos.
En suelo chileno, el cosplay tomó fuerza en la década de los años 2000, con la masificación de eventos y convenciones, donde los exponentes comenzaron a hacer performance y compartir con la gente este maravilloso arte.
Elizabeth Molina (Viña del Mar): brillante fabricante trajes que hace a “Groot”
“Empecé el 2012, después de ir por primera vez a un FanViña. Me dije: ‘Ya, el próximo voy a hacer un cosplay’. Cuando fui a ese evento me di cuenta de cómo la gente se emocionaba al ver un cosplayer. Esa felicidad que transmiten me incentivó. La cara de niños y adultos al ver tu carisma y el traje me encantó”, relata Elizabeth Molina Rojas.
Tiene 27 años de edad y es administradora de una agencia turística. En sus tiempos libres, da rienda suelta a su imaginación para crear sorprendentes maquillajes y trajes. Ha hecho variadas representaciones. En su mayoría “crossplay”, subcategoría en donde se interpreta a un personaje del sexo opuesto adaptado al femenino. Ha realizado a Megara de Hércules, el Capitán América, Eich de League of Legends, entre otros.
“Pero mi favorito siempre será Groot, es mi regalón. Gracias a ese Cosplay pude ganar mi primer concurso grande que fue Festigame del 2018, donde en el evento me di cuenta que fue furor” comenta feliz.
Vamos a lo difícil: ¿Cómo se hace un traje Cosplay?
En el proceso de creación -cuenta Elizabeth-, todo depende si es una armadura, prótesis, tela o texturas.
“Antes de empezar, lo que importa es tener un buen patrón, porque si al pasar las medidas al material estas no calzan, tendrás que hacerlo de nuevo”, advierte.
Y con “Groot” el resultado es simplemente fantástico. Así lo muestra la foto de Eli usando el traje:
Groot tuvo tres versiones, donde cada avance vislumbraba perfección. Eli cuenta que “la primera fue el 2014, para una Comic Con, la segunda el 2016; y el 2018 hice la última versión”.
Tardó dos meses en hacer el traje final. “Aunque no lo creas, está hecho de papel confort con látex, que le da una textura brillante. También tiene goma Eva. Es una especial, que con calor se moldea”, relata Elizabeth.
“Primero hice el molde de mi cara con yeso. Sobre ese molde con plastilina se empieza trabajar, luego se hace un negativo que lleva yeso líquido del cual sale la máscara. Con mi pareja tardamos un día y medio en hacer el rostro y las placas de corteza”, detalla.
Cabe destacar que Elizabeth le construyó junto a cuatro personas el traje de Jim Raynor de StarCraft a su pareja, el cual estuvo listo en 6 meses. La materia fue goma eva y… mucha… mucha dedicación.
Su Instagram: @elychanss
Carolina Mora (El Belloto): enfermera dando primeros pasos en el Cosplay
Empezó hace tres meses a introducirse al mundo del Cosplay, pero en poco tiempo ha logrado avances fantásticos. Carolina Mora Pizarro tiene 29 años, es enfermera y en sus tiempos libres, además de entrenar, es cosplayer.
“Desde pequeña que soy otaku (persona aficionada al animé y manga) y me gusta el animé. Cuando iba a los eventos veía a la gente que hacía cosplay de mis personajes favoritos y me encantaba sacarme fotos con ellos. Hace unos meses fui a un evento con prendas de Shingeki no Kyojin. A la gente le gustó y de allí no paré”, señala.
Ha interpretado a Sasha y Mikasa de Shingeki no Kyojin, Power y Makima de Chainsaw Man, a Maki de Jujutsu Kaisen, entre otros.
“Mi favorita es Maki. Es un personaje femenino súper fuerte y su personalidad osada me representa”, comenta la quilpueína.
“Hace poco me interesé por las costuras, de hecho el último traje que hice (Misato), lo hice de materiales reciclados. Todo el proceso ha sido familiar, con amigos, y mi madre que me ha ayudado harto; cuando era chica me hacía los disfraces y ahora de grande me ayuda con los cosplay para eventos.
En este corto tiempo también se ha interesado por mejorar el maquillaje, para caracterizar con más prolijidad a sus personajes. También aprovechar cada tela, para dar con el vestuario adecuado. Los pasos que da son veloces. Casi como lo de una heroína.
Su Instagram: @chessecakecosplay
