A casi dos años del brutal asesinato, la madre de Gonzalo Oyarzún aún clama por justicia
QUILLOTA.- Pasó hace casi dos años, pero aún no se olvida. El martes 20 de noviembre de 2018, a las 13:37 horas, se perpetró un crimen sin precedentes, en una tranquila ciudad como lo es Quillota.
Mientras Gonzalo Oyarzún estaba sentado en un escaño de la plaza, frente al monumento a Diego Portales, una mujer se acercó por su espalda. Y sin mediar palabra alguna le disparó dos veces en la cabeza, para luego de huir con un acompañante en dirección poniente por calle La Concepción, aparentemente en un colectivo de recorrido rural.
Tras cinco días de agonía Gonzalo falleció en el Hospital San Martín, pero de su verdugo y de su acompañante nunca se volvió a saber. Con el paso de los meses se dijo que habían escapado a Bolivia, pero lo cierto es que, a casi dos años de aquel sanguinario crimen, los asesinos siguen libres y la familia de la víctima aún clama por justicia.
“ESTO NO PUEDE QUEDAR ASÍ”
Margarita Sepúlveda, madre de Gonzalo Oyarzún, recuerda aquel día como si fuera hoy. “Estaba en un control del Hospital cuando me llamaron y me dijeron que le habían disparado a mi hijo. Llegué a la plaza cuando él estaba en el suelo todavía. Me quería morir cuando lo vi y me quiero morir ahora, porque han pasado dos años y los asesinos se pasean por todas partes”, dijo desconsolada la mujer.
Según relató Margarita, mucha gente le ha dicho que los asesinos andarían en el norte del país. Sin embargo, han sabido ser más hábiles que la justicia para evitar ser capturados. “Me dicen que los han visto en Arica, después en Iquique. Estuvieron en Bolivia, pero cuando los van a buscar no están, están muy protegidos porque trabajan para traficantes grandes”, indicó la mujer.
Lo último que Margarita supo de la mujer es que mientras se encuentra prófuga habría dado a luz a un hijo. “Me contaron que había tenido un hijo, la PDI me dijo que así iba a ser más fácil encontrarlos, pero eso no ha ocurrido. A veces ellos me preguntan si yo sé algo, pero para eso mejor trabajo sola, los encontraría más rápido que la PDI”, enfatizó.
Pese a que tiene confianza en que algún día caerán los responsables de alejarla de su hijo, Margarita no cree que esto suceda pronto. “Yo creo en la justicia de Dios, sé que los van a pillar, pero no creo que pase muy pronto. Yo he sido muy fuerte y voy a luchar para que esto no quede impune, pero sólo quiero que los encuentren antes de que me muera, para poder descansar en paz”, agregó la madre.
PDI DE QUILLOTA: “VAMOS BIEN ENCAMINADOS”
Desde aquel 20 de noviembre la investigación ha estado a cargo de la Brigada de Homicidios de la PDI de Valparaíso. Sin embargo, desde la zona también han estado siguiendo de cerca el lento avance de la investigación. El comisario de la Bicrim de Quillota, Wladimir Benavides, indicó que el proceso ha sido difícil, porque los culpables han recibido ayuda de terceras personas. “Durante este tiempo la Brigada de Homicidios de Valparaíso ha seguido llevando el caso. Se sigue trabajando, acumulando información y evidencia”, dijo.
Agregó que “hay nueva información que no puedo revelar, pero la investigación está abierta. Yo creo que vamos bien encaminados. En la parte investigativa estamos claros, pero si tú no quieres ser encontrado, te arrancas, te escondes y eso complejiza las cosas, sobre todo si muchas veces recibes ayuda de terceras personas”, cerró.
