Héctor Castro Valdebenito desapareció desde la puerta de su casa en calle Zenteno cuando tenía solo tres años
LA CALERA.- El 27 de febrero de 1979, Rosa Valdebenito González salió desde su casa, ubicada al final de calle Zenteno, cerca del canal, a comprar para hacer el almuerzo a su familia. De regreso le llamó la atención la presencia de unos vagabundos frente a su casa.
Rosa estaba separada y vivía con sus hijos, Héctor de tres años y una bebé de solo meses. Mientras cocinaba, Héctor salió a sentarse en la puerta de la casa que daba hacia la calle a comer un trozo de pan.
Tras apenas algunos minutos Rosa escucho que su hijo la llamaba, en su voz se sentía un grito de auxilio. Al salir rápidamente a buscarlo, el niño no estaba. Miró hacia todos lados; los vagabundos tampoco estaban. Buscó por un lado y otro, llegó hasta el canal, pero Héctor no apareció más.
SE LO TRAGÓ LA TIERRA
Con la congoja aún apretándole la garganta, Rosa Valdebenito recuerda que “fue como si se lo hubiese tragado la tierra”. Carabineros le dijo que debía esperar 48 horas para establecer una denuncia y comenzar a investigar.
Rosa pasó día y noche con su hija en brazos, preguntando a la gente, pero nadie había visto nada. Al tercer día apareció el padre del niño, hacía tiempo se había ido y construido otra familia. Supo de la desaparición de Héctor y se acercó hasta la casa de Rosa para decirle “no te preocupes, el niño está bien”. Carabineros investigó, pero no encontraron nada que pudiera vincular al padre con la desaparición.
En los años siguientes se realizaron varias investigaciones, el caso se reabría, buscaron incluso en el canal, pero nunca hubo resultados positivos. Luego de unos años, Rosa se trasladó a Quilpué a trabajar. “No quise irme antes, a pesar de que vivíamos muy mal. Siempre hemos sido gente de esfuerzo pero me rehusaba a salir de La Calera, pensando que un día mi hijo volvería”, relata.
APARECIÓ UNA PISTA
Fue hace poco que una sobrina comenzó una campaña en redes sociales, publicando su historia. Incluso contactó a una médium.
Gracias a esta campaña, la incansable Rosa fue contactada por un calerano que decía que su madre fue vecina del barrio Zenteno en aquellos años y que conoció el caso. Él le dijo que hace un año en el noticiario del canal Mega, apareció la historia donde un hombre de 44 años, aproximadamente, buscaba a su familia de La Calera.
El hombre del reportaje recordaba que había vivido cerca de la vía férrea y que había sido raptado por un vagabundo, que lo hizo andar mucho en tren. Este sujeto lo habría maltratado y él se escapó, siendo finalmente adoptado por una familia del sur.
Lorena Castro, la sobrina de Rosa Valdebenito, cuenta que “De inmediato traté de comunicarme con Mega, pero no he tenido respuesta. Esto es como una nueva luz de esperanza que se abre para nosotros, porque una madre que pierde un hijo nunca se cansa de buscarlo”, concluyó.
Es así como esperan obtener el contacto que les permita que, 39 años después esta dramática historia termine y tenga un final feliz.
