El senador Ricardo Lagos Weber cree que el documento firmado la semana pasada beneficia principalmente a los grandes agricultores
ENTREVISTA.- “Cuando hay situaciones extraordinarias, hay que tomar medidas extraordinarias”, dice el senador (PPD) Ricardo Lagos Weber, para argumentar a “El Observador” que no le gusta la solución que otorga el acuerdo firmado entre los representantes de las juntas de vigilancia del Río Aconcagua la semana pasada, en la distribución del agua.
El parlamentario dice que, a diferencia del año pasado en que el Ministerio de Obras Públicas decidió intervenir el afluente, los volúmenes asociados al acuerdo no son suficientes para atender las necesidades de todos los regantes.
“El año pasado se dictó un decreto de escasez hídrica, que permitió al Mop intervenir el río y hacer una distribución en las distintas secciones que fuera más justa a la de hoy. La semana pasada el ministro dijo que llegó a acuerdo con las diferentes secciones. Eso es cuestionable. He estado con dirigentes de la tercera y cuarta secciones que no están satisfechos con el resultado, porque no tienen garantía de que les vaya a llegar agua”, advierte.
– ¿Y cuál cree usted que sería una mejor solución?
“Habría que hacer lo que hizo el gobierno anterior, que le garantizó agua seis de los siete días de la semana a las secciones 1 y 2; y un día a la semana a la 3 y 4, por 4 meses, entre diciembre y marzo. Yo creo que se requiere una medida más extrema que incorpore a otros actores”.
– Pero el gerente de la Tercera Sección, Santiago Matta, dijo a “El Observador” que celebraba el acuerdo, después de años de desencuentros…
“Sí, pero es que aquí no estamos hablando de los grandes terratenientes, sino de los pequeños canalistas. El gobierno debe haber mediado en este acuerdo con sus mejores intenciones, pero acá hay dos señales malas: primero, no parece adecuada la forma en que se va a distribuir el agua; y, segundo, una señal asociada, al suspender el avance del Embalse Catemu. No quiero entrar aún en un eventual conflicto de intereses, con personas que tuvieron participación como privados en temas legales para impedir el embalse y que ahora están tomando decisiones desde el Ejecutivo”.
– ¿Hay antecedentes que respalden esa acusación?
“Podría haber. Pero como es ‘podría’, prefiero no profundizar, porque lo escuché de otro parlamentario. Lo que yo hice fue ‘parar la oreja’ y voy a recabar información “.
– Usted recuerda la intervención del río, pero hay una resolución de la Corte que favoreció a la Primera Sección, que establece que esa intervención era ilegal, con lo que esa medida queda con dificultades jurídicas…
” Yo no desconozco el fallo de la Corte, pero entonces ¿qué va a hacer la autoridad? ¿Dejar sin agua a zonas de la tercera y cuarta secciones? Se están asignando volúmenes de agua que ya están castigados respecto de lo que tenían el año pasado, porque se aplica una tesis de que hay un 40% menos de aguas lluvia y un 30% menos de nieve acumulada y, por eso se reduce la cuota que hubo el año pasado en medio de la intervención”.
– Claro: el cierre de compuertas se baja de 36 a 24 horas
“Claro. Y se dice que el agua aumentará si es que mejora el caudal. Pero eso es muy relativo”.
– Pero, su los derechos de agua son privados, ¿no es lógico un acuerdo entre los usuarios del agua?
“Eso me lleva a otra pregunta, al tema más de fondo: la forma de funcionamiento de los derechos de agua. Ese debate va a generar una división política más clara entre aquellos que entienden el agua como un bien privado comercializable y los que creen que es un bien de uso público, que debe tener un uso humano, primero; y, productivo, después, distribuido de manera equitativa y sin derechos especulativos sobre los mismos, que es pasa ahora”.
– ¿Y en qué está la Reforma al Código de Aguas en el Congreso?
“Yo espero que, una vez terminada la discusión de la Ley de Presupuesto, tengamos un debate sobre este tema. Si no lo resolvemos ahora, con algo más consensuado, se va a politizar en las campañas parlamentarias y sobre todo en la de gobernadores regionales. Ahí se verá qué le decimos a la gente de la provincia de Quillota: ¿Le diremos que la Corte falló a favor de la primera sección y que se van a quedar sin agua? En esta zona hay gente que no tiene plata para pozos, como la tienen los grandes empresarios”.
– Pero la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) ha estado siempre en contra de las modificaciones…
“Ellos tendrán sus razones. Pero el tema se va a resolver en el parlamento. Chile es uno de los pocos países del mundo (dos o tres) donde funciona un sistema donde tienes Derechos de Agua y, si quieres, los puedes vender; y, si no los usas, no los pierdes. No es algo muy inteligente darse cuenta de eso”.
-¿Hay división entre los representantes formales de la tercera sección y los pequeños canalistas?
“Es exactamente lo que yo he entendido y me han compartido. Que hay una división o, al menos, miradas distintas. Al parecer aquellos con más espaldas financieras y capital, tienen mayor potencial para absorber el acuerdo que aquellos que dependen del agua de los canales y no de pozos profundos”.
– ¿Hay alguna zona más específicas que ve como más vulnerables?
“Me reuní hace meses con canalistas de Hijuelas, preocupados por la caída del Embalse Catemu Y al final se cayó. Ellos no están contentos con este acuerdo. Por eso creo que, en vez de botar el acuerdo, tiene que haber opción de enmendarlo. ¿O debemos conformarnos con la idea de que los pequeños se tienen que arreglar solos?”.