Dirigente ambiental y empresa a cargo de las obras se enfrascan en trama judicial a raíz de ataque registrado en centro de ecoturismo de La Dormida.
OLMUÉ.- En la edición del viernes 8 de septiembre, “El Observador” dio a conocer una denuncia presentada por el empresario Mario Aravena, quien la madrugada del martes 5 del mismo mes sufrió un ataque vandálicoa al interior de su emprendimiento de ecoturismo.
En dicha ocasión, los sujetos rompieron los baños y algunas ventanas, siendo lo más grave una amenaza que quedó escrita en una de las puertas, la cual decía “Para la otra es tu casa (SIC)”. Por lo mismo, Aravena presentó una denuncia ante el Ministerio Público para dar con los responsables.
Las obras que se ejecutan en La Dormida
Y si bien todavía no ha sido posible identificar a quienes estuvieron detrás de este ataque, el empresario y dirigente ambiental manifestó que “esto fue una represalia (…) Yo vivo en la cima de La Dormida y desde noviembre del año pasado me he visto afectado por las obras que se están efectuando”.
Los trabajos mencionados por Aravena corresponden a los desarrollados por la empresa Aguas Pacífico, consistentes en la instalación de un ducto subterráneo que permitirá transportar agua para uso industrial entre las regiones de Valparaíso y Metropolitana.
En este contexto, el empresario aseguró que “denunciamos falta de cierre perimetral, polución, accesos no regulados, entre otras cosas”. Lo anterior se suma a otros reclamos relacionados con tronaduras desreguladas y extracción de material en horario nocturno.
También, según el dirigente ambiental, habrían sufrido malos tratos por parte de los trabajadores que se encuentran ejecutando la obra. “Lo que pasó (la madrugada del martes de la semana pasada) fue una represalia ante las denuncias generadas por los vecinos”, afirmó Aravena.
Respuesta de la empresa
“El Observador” consultó a Aguas Pacífico, entidad que a través de su gerente de Sustentabilidad y Asuntos Corporativos, Jorge Sanhueza, manifestó que “hemos desarrollado un plan de relacionamiento comunitario permanente con la comunidad de La Dormida, con los vecinos y sus organizaciones, donde abordamos de manera proactiva y preventiva todos los inconvenientes que puede generar la faena”.
“En materia de ruido -agregó-, se hacen mediciones diarias para cumplir con la normativa vigente en diversos puntos. El diseño del monitoreo de esta variable fue acordada y definida con la participación de la comunidad de La Dormida, quienes están informados de los resultados obtenidos de manera permanente. Aguas Pacífico ha realizado además una serie de inversiones para mitigar el impacto de la operación”.
Respecto de las tronaduras, expresó que éstas “cumplen con la normativa vigente. Y según nuestros expertos, es prácticamente imposible que las vibraciones produzcan daños a infraestructura aledaña. (…) De todas formas, se estableció que, al finalizar las obras y en un radio de 500 metros de la boca del túnel, en caso de ocurrir un deterioro imputable a los trabajos de construcción del túnel, la empresa reparará las viviendas según el catastro inicial”.
Y finalmente, respecto de las denuncias relacionadas con la vandalización de Ecopark, sostuvo que “ni Aguas Pacífico ni la empresa contratista Mas Errázuriz -o sus trabajadores- tienen relación alguna ni responsabilidad con dichos hechos. Al contrario, desde este señor Aravena y su familia se han recibido ataques y violencia contra equipos y trabajadores. La posición de las empresas ha sido no responder ni entrar en el juego de esta persona individual”.
Finalmente, mencionaron que “la empresa Aguas Pacífico ha desarrollado un plan de relacionamiento comunitario permanente con la comunidad de La Dormida, con los vecinos y sus organizaciones (…) Lamentamos los hechos de violencia que esta persona ha ejercido, por lo que ambas empresas en los próximos días presentarán acciones ante la justicia para detener estos hechos ilegales y asegurar la integridad física de los trabajadores y vecinos”.