El pequeño crucino fue el héroe de la jornada ayudando a su mamá mientras esperaba la llegada de la ambulancia y Carabineros
LA CRUZ.- Un nacimiento, en la mayoría de los casos, es una bendición para las familias, las que se preparan para recibir al nuevo miembro. Sin embargo, por muchas precauciones que se tomen, existen situaciones inesperadas que no se pueden manejar, tal como ocurrió en el nacimiento de la pequeña Martina Varas Gutiérrez, ocurrido el pasado miércoles por la tarde en su departamento ubicado en la comuna de La Cruz.
Según relató a “El Observador” Marcelo Varas, padre de la pequeña Martina, él junto a su pareja Marjorie Gutiérrez y el hijo mayor de ambos, Nicolás, de apenas 7 años, esperaban ansiosos la llegada de la pequeña, quien según los controles efectuados en el Consultorio de La Cruz nacería cerca del 6 de junio, por lo que quedaba poco tiempo para esta alegría.
39 SEMANAS
Según les habían informado, Marjorie tenía 39 semanas de embarazo y si bien por la mañana sintió algunas contracciones, no le pareció suficiente para ir al hospital. “En la mañana se le salió el tapón, pero me dijo que estaba bien, que no la llevara al Hospital”, indicó Marcelo, quien en horas de la tarde salió a hacer un trámite a la notaría. “Fui como a las 6 y cuando estaba haciendo el trámite me llamaron para decirme que mi hija ya había nacido”, cuenta aún sorprendido el padre.
Durante aquella media hora, en su departamento de calle Cardenal Caro, se estaba desarrollando uno de los acontecimientos más importantes en la vida de su pareja y, sin duda, de su hijo Nicolás, quien se convirtió en el gran héroe tras asistir a su madre y ayudando a nacer sin complicaciones a su hermanita Martina, según contó orgulloso el padre.
“En casa estaba Marjorie con mi mamá y mi hijo Nicolás”, señaló, agregando que ellos debieron encargarse de todo mientras esperaban la llegada de la ambulancia, que fue contactada para atender el rápido parto. “Nicolás me contó muy relajado que estaba en el baño cuando escuchó gritar a su mamá y partió a socorrerla”, añadiendo que el pequeño le llevó sábanas limpias y la cuidó en todo momento hasta concretar el nacimiento de la bebé.
TRASLADO CON ESCOLTA POLICIAL
Al cabo de pocos minutos llegó hasta el domicilio la ambulancia del SAMU, trasladando rápidamente a la madre y a su pequeña hija recién nacida hasta las dependencias del Hospital San Martín de Quillota, donde recibió las atenciones necesarias luego del exitoso e improvisado parto.
Más adelante, la familia en pleno pudo reunirse en la Unidad de Maternidad del centro asistencial quillotano. “Le di un abrazo a Nicolás porque fue muy valiente, no sé si otro niño de 7 años está dispuesto a participar en un parto y ayudar a la mamá como él lo hizo, estoy muy orgulloso”, declaró Marcelo, quien también tuvo palabras similares para su pareja. “La flaca también fue muy valiente, hay que tener agallas para tener un bebé en la casa”.