Echaron lo sustraído dentro de un par de mochilas y tomaron una micro para huir.
LA CALERA.- Para una madre y su hija era una visita de cambios de mercaderías a un centro comercial y otros trámites pequeños en el centro de la ciudad. Sin embargo, todo terminó con la desagradable sorpresa de que al automóvil en el que se movilizaban le destrozaron los vidrios traseros. Un par de jóvenes los quebraron para ingresar en pocos minutos al auto y robarse una gran cantidad de especies y dinero.
El hecho ocurrió en el sector de la calle Prat, cerca de las oficinas del Registro Civil y de la empresa sanitaria Esval. En una de las tardes del último fin de semana, los sujetos -que eran los únicos que se veían en las calles del sector- actuaron sin mayores problemas, para apropiarse indebidamente de una cartera, con varios elementos de valor, y en especial, un reloj valorado en más de medio millón de pesos, que había sido llevado a la ciudad para cambiarle sus pilas.
Además del valioso reloj, que no es propiedad de la víctima, los dos ladrones se llevaron una cantidad indeterminada de dinero, las tarjetas de pago de la dueña del móvil y un regalo que le habían entregado, recientemente, a un familiar que contenía ropa de bebé: los sujetos echaron todo en un par de mochilas, tomaron un microbús y se subieron a él como si no hubiera ocurrido nada.
Pese a que las víctimas tenían en su poder el número del microbús en el que huyeron los ladrones, la víctima señala que los policías no siguieron al bus, por lo que no se pudo determinar la responsabilidad de los ladrones y recuperar las especies que se robaron en el centro de La Calera, donde existen numerosas cámaras de vigilancia.
