Con un proceso metalúrgico de recuperación de hierro, es posible generar un material de alta resistencia y con alto valor comercial a partir de las escorias de cobre.
TENDENCIAS.- Un equipo de investigadores de la Universidad Técnica Federico Santa María descubrió un mecanismo con el que darle una nueva utilidad a las escorias que se generan con la fundición de cobre. A través de un proceso metalúrgico de recuperación de hierro, se puede crear un material de alta resistencia y con alto valor comercial, que servirá para desarrollar nuevos productos y responder a necesidades de otras industrias presentes en Chile.
Las escorias de fundición son uno de los principales desechos sólidos en las plantas de la industria del cobre. Solo en Chile por cada tonelada de cobre producido se generan alrededor de 2,2 toneladas de escoria, y se producen anualmente 4,5 millones de toneladas de escoria.
“Por una parte, se ofrece una alternativa innovadora para resolver el problema del almacenamiento e inutilización de la escoria proveniente de fundiciones y, por otro lado, el proyecto busca visibilizar una atractiva oportunidad de negocio“, cuenta el doctor Claudio Aguilar, director del Departamento de Metalurgia y Materiales de la USM y líder del proyecto, que podría reducir el impacto ambiental del proceso de fundición de cobre.
“Las escorias de concentrados de cobre tienen alrededor de 40% de hierro, cuyo mercado va en crecimiento debido a la alta demanda de la industria automotriz, defensa, energía, construcción, medicina“, explica Aguilar.
“Si se obtiene el hierro puro puede tener un valor de 1 USD el kilogramo, pero cuando desarrollamos este material avanzado que tiene una serie de propiedades, su valor se dispara a 30 USD el kilogramo”, asegura el doctor.
La investigación fue financiada con el Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDEF) y se tituló “Obtención de polvos de aleaciones metálicas ricas en hierro a partir de un método innovador para la valorización de escorias de descarte de fundición de Cobre” (FONDEF ID 19|10163).
El proyecto, que concluirá este 2022, se ha impulsado de manera colaborativa con el Departamento de Industrias de la misma casa de estudios, junto a empresas privadas asociadas al proyecto (CAP Minería – III Región y Anglo American, Fundición Chagres – V Región) y con el soporte también de la Universidad de Atacama.
El equipo de trabajo está compuesto por los investigadores Dr. José Palacios, Dr. Mario Sánchez, Dr. Nicolás Arara, Dr. Rodrigo Yepsen, el Dr. Raúl Fuentes del Departamento de Industria, Dr. Danny Guzmán y la Dra. Ana Rivera de la Universidad de Atacama.
“Estamos muy contentos con los resultados y ahora estamos afinando la composición química y preparando la propuesta a escala piloto para presentar a FONDEF y evaluar, luego del estudio de impacto ambiental, si hay interés de las empresas para traspasar este conocimiento y tecnología”, dice el Dr. Claudio Aguilar.