Es parte de la reestructuración de la Unidad de Emergencias que contempla 3 espacios diferenciados para las urgencias COVID y más graves, pediátricas y casos moderados a leves
QUILPUÉ.- La Emergencia Sanitaria no ha dado tregua en la atención de urgencia hospitalaria, sin embargo, la implementación de un plan de restructuración de la Unidad de Emergencia del Hospital de Quilpué, que consideró separación de espacios, habilitación de una Urgencia B, diferenciación de los flujos de atención, el aumento de la capacidad de reanimación y equipos de salud diferenciados, ha generado mayor orden y capacidad de atención a pacientes que concurren al recinto de salud a causa de una emergencia médica.
Según explicó el Jefe de la Unidad de Emergencia, Dr. Víctor Arancibia, se implementó un plan integral con cambios en el funcionamiento habitual de la Unidad. La Separación de la Unidad de Emergencia Infantil fue una de las principales modificaciones, lo que significó cumplir con un anhelo de la comunidad para que los flujos de atención fueran diferenciados entre adultos y niños.
Otro de los dispositivos elementales de esta restructuración fue la habilitación de una Urgencia B, planificada antes de la pandemia pero que se hizo efectiva en plena emergencia sanitaria. “Esto nos permitió mantener la Unidad Emergencia habitual (A) para pacientes de mayor gravedad covid y no covid, mientras que la urgencia B está destinada a pacientes moderados y leves tanto de medicina como de cirugía” explicó el Jefe de la Unidad de Emergencia.
A su vez, explicó que “estamos trabajando con las separaciones de atención que exige el Minsal para pacientes COVID a través de un SAUD respiratorio que se habilitó en la sala de espera de la Unidad de Emergencia A, donde se realiza la toma de muestra y atención médica en forma separada. Además aumentamos la capacidad de reanimación con dos reanimadores, uno No Covid con dos camillas disponibles con todo su equipamiento y un reanimador Covid con 3 camillas equipadas”, explicó el Dr. Arancibia.
La Urgencia B cuenta con dos box de atención, tomas de oxígeno para seis pacientes y sillones tipo poltronas que permite a los pacientes recibir medicamentación o esperar exámenes en un espacio mucho más cómodo y digno.
“A pesar de la Pandemia tenemos tiempos de espera mucho menores y está todo más ordenado, los pacientes pediátricos no se mezclan con los pacientes adultos, los flujos siguen siendo muy estrictos a causa de la emergencia sanitaria pero hay una mejor organización”, finalizo el Jefe de la Unidad de Emergencia Dr. Víctor Arancibia.