Espectáculos de calidad, cientos de emprendimientos y destrozos en la primera jornada marcaron esta nueva edición del evento
QUILLOTA.- Fueron cinco días llenos de emociones, música y emprendimientos. La tradicional “Expo Feria Yo Creo en Quillota” sorprendió a los asistentes en su vigésima edición, aunque como suele suceder en todo evento, hubo momentos buenos y otros no tanto.
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Durante la primera jornada, el show estuvo a cargo de Compañía Tropikal, Germán Casas, Kramer y Leo Rey. Ese día llegaron más de siete mil personas y había expectación, sobre todo porque horas antes del inicio de la fiesta se habían anunciado manifestaciones e incluso funas.
Al comienzo, decenas de personas llegaron con carteles alusivos a la crisis hídrica y otras consignas, aunque posteriormente la situación se tornó violenta. De hecho, el punto negro de esa jornada, y posiblemente del evento, fue la destrucción de la piscina municipal donde se desarrollan los talleres gratuitos de verano.
La siguiente jornada incluyó a Levtraru, Pastelito de Chile, Guachupé y Villa Cariño. Y si bien los artistas eran esperados por sus seguidores, la cantidad de asistentes disminuyó a seis mil. El viernes fue el turno de Samsara, Los Tres y Denis Rosenthal, congregando a más de 12 mil personas que disfrutaron del espectáculo musical. En ambas jornadas no hubo incidentes.
El sábado, los niños disfrutaron con las canciones y los personajes de Cachureos, mientras en el espectáculo nocturno estuvieron los locales de Monocromáticos, Jorge Alis y Jordan. Esa noche, llegaron cerca de 19 mil asistentes.
Y para la última jornada las expectativas eran altas, ya que era el turno del cantante internacional que pondría el broche de oro a la nueva edición de la “Expo Quillota”. El español Alex Ubago encantó a los presentes, quienes además disfrutaron de la presentación de la banda quillotana Mantiz Band. En esa ocasión, fueron más de 10 mil los que llegaron al Estadio “Lucio Fariña Fernández”.
Dentro de los elementos a destacar está la participación de las bandas teloneras, las cuales aprovecharon muy bien la oportunidad de mostrar su talento ante un masivo público. Y en cuanto a los espectáculos de mayor convocatoria, Jorge Alis se llevó todos los aplausos por su humor contingente mientras Denise Rosenthal demostró su crecimiento musical.
Una polémica presentación tuvo el payaso Pastelito de Chile, quien fue criticado por algunos por su humor con doble sentido ya que su espectáculo era para los más pequeños. “Es importante que se mantenga el humor pícaro del payaso chileno, el tradicional y que sea con un poquito de doble sentido”, se defendió el humorista.
Finalmente, casi como tarea pendiente, quedó el marco de público que estuvo en las cinco noches. En esta oportunidad, los asistentes ascendieron a más de 55 mil personas, cifra menor si se considera que la última versión de la Expo, en 2018, congregó a cerca de 80 mil. Eso sí, a la gran mayoría de los quillotanos les pareció buena idea realizar este evento en verano, situación que desde el municipio es vista con buenos ojos.
