Falleció por una caída de altura cuando había terminado de ejecutar su arte en una fiesta electrónica.
LA CALERA.- Carlos Felipe Díaz Cortés, a sus 35 años, era ingeniero comercial, emprendedor, agricultor y amante de la música. Su vocación -que nunca abandonó- la adquirió siendo estudiante, cuando formaba parte de la banda del Instituto Rafael Ariztía. Y con el paso del tiempo, llegó a ser reconocido en el mundo de la electrónica como “DJ Charlie Deys”.
En el desarrollo de esta pasión, a eso de las 06:45 horas del domingo 21 de abril, falleció tras terminar su participación en la actividad musical denominada “Showcase. Amigos Tod/B. Day Sesión”, donde participó como DJ en el Centro de Eventos “El Huevo” de Valparaíso.
Según se informó en dicha oportunidad, el joven artista subió desde un montacarga hasta una altura cercana a los cinco metros, para luego precipitarse contra el suelo. Su trágico deceso, según las primeras indagaciones policiales, se debió a un accidente.
Sin embargo, para sus cercanos, algunas cosas no explicaban totalmente la tragedia. Por eso, la semana pasada la familia de Carlos Díaaz Cortés recurrió al abogado Juan Carlos Manríquez, quien conversó con “El Observador” y explicó los pasos a seguir en materia judicial.
“La familia tiene una pérdida irrecuperable, por lo que ahora quiere que se aclaren completa y profundamente los hechos ocurridos durante esa jornada. Y, por sobre todo, conocer las condiciones en las que se produjo esta lamentable muerte“, explicó Manríquez.
Iniciaron acción judicial
“Hemos presentado una querella, en representación de los padres de este ingeniero y joven DJ, en relación con hechos que puedan revestir carácter de delito imprudente o con dolo eventual. Para eso, hemos avanzado en la investigación”, dijo el abogado.
“Hemos ido proponiendo una serie de diligencias técnicas, especificas y determinadas a la Fiscalía (de Valparaíso), entidad que lleva adelante las indagaciones”, aseguró Juan Carlos Manríquez.
“Los hechos -agregó el profesional- son graves, muy delicados y dolorosos. Contamos con una serie de antecedentes que iremos desarrollando durante la investigación. Desde el punto de vista jurídico y la legislación existente sobre Urbanismo y Construcciones, hemos solicitado información a todas las autoridades que tienen que ver con el control de la seguridad laboral“.
Entre ellas, Juan Carlos Manríquez citó las recepciones municipales, los planos, las conexiones eléctricas y la nómina de autoridades que deberían estar certificando el uso de ascensores y montacargas.
“Nosotros contamos con una serie de otros datos, que por ahora preferimos mantener en reserva y hemos pedido diligencias de carácter informático sobre distintas plataformas y comunicaciones, que han arrojado datos relevantes para la investigación”, detalló.
El abogado finalizó, señalando lo siguiente: “Todavía no tenemos en vista, y tampoco la familia, una acción civil o reparatoria. Por ahora, sus esfuerzos están destinados a esclarecer completamente cuáles fueron las circunstancias cabales en las que su hijo falleció. Y, si hay alguna persona responsable de los hechos, imputarla y condenarla”.