Recinto que se ubica en el sector de El Retiro y es ejecutado por la Fundación Amalegría, atiende actualmente a 16 personas
QUILPUÉ.- Durante esta mañana el seremi de Desarrollo Social de Valparaíso, Ricardo Figueroa, realizó una visita al albergue para personas en situación de calle que se encuentra ubicado en el sector de El Retiro en Quilpué para compartir con los asistentes al centro una gran noticia: la extensión hasta el 29 de noviembre de este importante dispositivo de protección.
Este albergue, que es ejecutado por la Fundación Amalegría con aportes del Ministerio de Desarrollo Social, inició la entrega de diferentes servicios el pasado 1 de mayo y cuenta con un cupo para 20 personas (actualmente residen 16). Y si bien estaba pensado sólo para adultos mayores, terminó recibiendo personas de todas las edades que así lo requerían.
El seremi Ricardo Figueroa señaló que “esta es una extensión histórica que estamos realizando de los albergues para personas en situación de calle. Tomamos esta decisión como Gobierno y serán cuatro los que seguirán en funcionamiento en la Región. Este de Quilpué va a completar 210 días de funcionamiento, lo que significa protección y prevención de los contagios, pero también implica un apoyo que se ha necesitado mucho en el contexto de lo que hemos vivido este año”.
Por su parte, Cecilia Quinteros, directora de la Fundación Amalegría, señaló que “recibimos esta noticia con mucha alegría, porque de verdad es una preocupación el poder contar con un espacio para las personas que tenemos albergadas, quienes han podido sanar y descansar de lo que es su vida en la calle, pero sabemos que después de salir de estos albergues su destino es la calle, lo que en situación de pandemia los pone en un tremendo riesgo. Estamos muy agradecidos”.
En tanto, don Domingo Muñoz, uno de los adultos mayores que estaba en situación de calle y que llegó hasta el albergue de El Retiro, comentó que “mi corazón me había avisado antes que esto se iba a prolongar, no sé por cuánto tiempo más será, pero estoy muy feliz, porque yo he sufrido mucho al vivir en la calle, pese a que lo tuve todo. Cuando me vinieron a dejar acá me recibieron de una forma como si me hubiesen conocido de antes y me pude recuperar de un problema que tenía en la pierna y no podía caminar, incluso pensaba que me le habían cortado”.
