Así lo manifestó Tarek Giacaman, candidato de Evópoli para llegar al Congreso representando a la Región de Valparaíso por el Distrito 7
CONCÓN.- Tiene 27 años y es uno de los candidatos a diputado más jóvenes de la región. Se trata de Tarek Giacaman Mahana, quien es oriundo de Concón y estudió derecho en la Universidad Adolfo Ibáñez de Viña del Mar.
Padece de atrofia muscular, una discapacidad que no le ha impedido tener una vida activa en el mundo de la política. De hecho, fue presidente de la Federación de Estudiantes en su casa de estudios, lo cual lo motivó a postularse para el Congreso. Además, trabajó en el Centro de Estudios Horizontal como director de formación, donde su principal labor era formar jóvenes que quisieran dedicarse al servicio público. “El Observador” conversó con el candidato, para conocer sus propuestas y su visión de la política.
– ¿Considera que haber sido presidente de la Federación de Estudiantes de su universidad marcó el inicio de su vida política?
“Una Federación de Estudiantes es, sin duda, una preciosa escuela para quienes quieren dedicarse a la política adulta, ya que es un espacio para aprender a organizar, soportar la crítica y manejar asambleas. Eso enseña muchísimo para el camino político y entrega una visión amplia de cómo se construye la sociedad. Sin embargo, desde muy chico quería entrar a este mundo, porque creo que todos los cambios deben ser sistémicos”.
– Los problemas de salud son parte del sistema y usted ha vivido ese inconveniente, ¿cómo ha sido ese proceso y cómo lo ha ido superando?
“Soy una persona en situación de discapacidad. Sufro de atrofia muscular y, para ser simples, todos los músculos de mi cuerpo están atrofiados, es decir, no tienen fuerza. Hoy en día estoy sometido a un tratamiento llamado Spinraza, lo que retrasa el avance de la enfermedad. Y esta etapa la he superado con resiliencia, ya que desde pequeño me enseñaron a levantarme y que debo saber cuándo afrontar las cosas solo y cuando debo solicitar ayuda. Pero para mí ha sido una maravilla mi padecimiento, ya que me ha enseñado a ver el mundo con otra perspectiva”.
– ¿Cómo se gestó su llegada a Evópoli?
“Conocí Evópoli el 2014, cuando era presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Adolfo Ibáñez. No veía esperanza en los partidos tradicionales para oxigenar la política y ahí conocí a Felipe Kast. Él tenía ideas innovadoras y representaba una centroderecha que respetaba las diversidades en todas sus formas. En el partido hay una idea de buscar la igualdad del bien público”.
– ¿Por qué quiere ser diputado y cuáles son sus principales propuestas para la región?
“Este país pide a gritos inclusión y que nos ocupemos de las personas que están en situación de discapacidad. Y creo que esos cambios llegarán cuando alguien que los haya sufrido esté a cargo de la toma de decisiones. La corrupción es otro punto fundamental, hay que generar un sistema capaz de prevenir y sancionar, de tal forma que los involucrados pierdan los cargos de por vida. Otro tema es la seguridad y el Estado de Derecho, donde no se necesita refundar las instituciones, más bien, aplicar sentido común. Se pide renovación pero debe ser en base a lo que ya tenemos.
