Se vino a Chile hace seis años y encontró en La Cruz la mejor plataforma para dar rienda suelta a su talento
LA CRUZ.- Manuela Quiñones Villa es modista, diseñadora de vestuario y artesana. Hace seis años decidió emigrar de España a Chile debido a la crisis económica que se vivía en su país, para instalarse después de varias vueltas en La Cruz.
“Había que hacer algo, pues no había trabajo por ningún sitio. Siempre fui apatronada y en ese momento, junto a mi ex marido, empezamos a pensar qué hacer para salir del problema”, explicó Manuela, quien en ese momento vivía en la ciudad de Pamplona.
Fue en ese entonces cuando un amigo chileno los motivó a probar suerte en tierras nacionales, específicamente en Limache. “Nos vinimos a la aventura y nos atrevimos”, confesó esta virtuosa artesana.
Aseguró que, a pesar de los cambios culturales evidentes, quedó fascinada con Chile y que su estadía en territorio nacional ha sido grata y exitosa, ya que de inmediato se entusiasmó con la idea de trabajar de forma independiente.
De hecho, viajó con sus máquinas de coser y herramientas de confección, situación que le acomodó bastante puesto que tenía hijos pequeños y no le gustaba la idea de dejarlos solos, por lo que trabajar desde el hogar era cómodo y perfecto para dar rienda suelta a sus proyectos.
“Siempre me han encantado las carteras, así que decidí confeccionarlas, utilizando, en primera instancia, restos de tapicería, lo que ha ido evolucionando, pues actualmente uso tachas, ecocuero y otras telas”, mencionó Manuela.
Empezó con esta idea apenas llegó a Chile. Pero fue en diciembre de 2014 cuando decidió mudarse a La Cruz, debido a la tranquilidad, seguridad, limpieza, orden y cercanía de la ciudad, logrando concretar con creces su proyecto.
SELLO PERSONAL
Y es que esta emprendedora, que actualmente reside a la altura del paradero 12, no solo quiso quedarse con la manufactura de carteras, sino que también vio en la comuna una oportunidad para fabricar una amplia gama de productos con diseños únicos y exclusivos, donde se suman mochilas, vestidos de gala, disfraces, indumentaria para teatro, pieceras, fundas para sillas y sillones y tapicería.
“Si bien ser apatronada te da seguridad económica, ser independiente es un reto constante, un crecimiento personal de reinventarse cada día, lo que se vuelve muy enriquecedor”, afirmó la europea que no pretende irse de Chile y que, muy por el contrario, vino a quedarse y a posicionarse con su marca personal “Confecciones Manu”.
