La agresión se cometió en el frontis del colegio y apoderados e inspectores alertaron a carabineros
LA CALERA.- El caso del pequeño de 7 años que murió tras ser brutalmente golpeado por su abuela conmovió a todo el país, especialmente a la comunidad del colegio Bercab, donde el menor asistía.
En este contexto es que hace unos días atrás en horas de la mañana cuando llegan los apoderados a dejar a sus hijos algunos de ellos se percataron que uno de los padres estaba zamarreando a su hijo de 9 años. Luego según los testigos habría tirado de sus cabellos, pegándole con la mano en distintas partes del cuerpo para finalmente darle un fuerte golpe de pie en su abdomen.
Los apoderados que presenciaban el hecho de agresión avisaron rápidamente a la inspectora, quien decidió retener al padre del niño y llamar a carabineros.
El menor fue llevado a constatar lesiones al hospital Mario Sánchez Vergara donde los paramédicos detectaron heridas contusas en el labio. Tras la constatación de lesiones leves, el padre quedó detenido pasando a control de detención al día siguiente.
En el tribunal, la medre del menor justificó a su pareja, indicando que él nunca ha sido agresivo con el menor y que tiene que haber hecho eso “en un momento de enojo”.
Finalmente este padre quedó en libertad ya que no se pudo constatar que existieran otro tipo de lesiones más que la herida en el labio y tampoco saber si realmente este fue quien la ocasionó por lo que la investigación durará 120 días, tiempo suficientes para que un organismo vea las posibilidades de conocer la realidad que sufre el niño.
La sensibilidad que hay ante estos hechos ha sensibilizado a toda la comunidad, generándose un ambiente de mayor atención a los niños que sufren agresiones por parte de sus padres.
