Celia Jeria fue la secretaria de la Asociación ANFA por más de 30 años y un fatal accidente le arrebató la vida
SAN FELIPE.- Celia Jeria trabajó por más de 30 años en la ANFA de San Felipe como secretaría. “Ella se sabía el reglamento del fútbol amateur al revés y al derecho, era única”, asegura el presidente de la asociación.
Como todos los lunes, Raúl Reinoso, presidente de la Asociación de Fútbol Amateur de San Felipe, esperaba ver en una nueva reunión a quien dice era “su mano derecha”: Celia Jeria Chailán. Sin embargo, esto no ocurrió.
Ese mismo día fue comunicado de su fallecimiento, una noticia que no esperaba. Su partida, dice el timonel de ANFA, fue como “si me hubiesen cortado la mano derecha y tapado un ojo. Ella todo lo sabía, la documentación, todo, era una persona muy ordenada, correcta y responsable”, recuerda con afecto Reinoso de su amiga y compañera de trabajo a quien llamaba de cariño “señorita Jeria”.
MUERTE REPENTINA
Como cualquier día familiar, el sábado pasado, Celia Jeria, de 54 años, compartía una tarde de descanso con su esposo e hijos, sus mellizos Diego y Joaquín Valenzuela Jeria, de 14 años, en una parcela ubicada en la comuna de Calle Larga.
La poda de un palto realizada hace unos días atrás animó a la familia a recoger los frutos del árbol que se encontraban tirados en el predio. Pero en ese momento, en cuestión de segundos, Celia cayó repentinamente al suelo.
Rápidamente recibió los primeros auxilios, pero no lograron estabilizarla. Una vez que personal del SAMU llegó al lugar, fue trasladada al Hospital de Los Andes y luego derivada al Hospital San Camilo de San Felipe, donde ingresó grave y no pudo recuperarse.
En un principio, quienes se encontraban con ella al momento de su caída, pensaron que había sido algunos de los ramales del palto lo que había golpeado duramente a la conocida secretaria de ANFA.
Sin embargo, el día que retiraron su cuerpo desde el Servicio Médico Legal, supieron que el estallido de una vena en su cabeza le provocó la muerte.
En resumen, la querida y conocida secretaria fue víctima “de una hemorragia cerebral y un posterior paro cardiaco”, detalló el jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI de Los Andes, comisario Gino Gutiérrez.
UN ENORME LEGADO
En las reuniones de los días lunes de la asociación, Celia Jeria se preocupada de dejar queques y un termo para el té sobre el escritorio, cuenta Reinoso, destacando que “era muy atenta y dedicada con nosotros. Lo que le pagábamos para todo lo que ella hacía y entregaba, nunca habría alcanzado. Es la mejor colaboradora que teníamos”, asegura.
La describe como una mujer responsable, que nunca tuvo una mala palabra y que siempre tenía las cosas bien ordenadas. “Yo le pedía algo que necesitaba y ella al tiro lo tenía. La parte reglamentaria del fútbol amateur se lo sabía al revés y al derecho, era única”, señala este fanático del fútbol que lamenta su partida.
A estas cualidades, añade que la querida secretaria, que trabajaba para mantener el orden en la administración de la asociación, siempre lo llamó respetuosamente “señor Reinoso”. “Nunca me dijo oye o me tuteó. No voy a tener de nuevo una persona que me llame así”, piensa.
EL ÚLTIMO ADIÓS
A las 15:30 horas del pasado martes, los familiares, amigos, vecinos y deportistas que conocieron a esta joven mujer, madre, esposa y trabajadora, ya se reunían en las afueras de la Iglesia La Merced de San Felipe para dar un último adiós.
Minutos antes de comenzar la misa, mientras los asistentes entraban a la iglesia para acomodarse, el esposo de esta querida sanfelipeña, Freddy Valenzuela, recibía por parte de sus seres queridos afectuosos abrazos y palabras de aliento por su pérdida.
Una vez terminada la misa, a eso de las 16:15 horas, su marido junto a familiares, y de escolta sus dos hijos, llevaron el féretro a la carroza fúnebre para continuar con el funeral en el Cementerio Parque Almendral, en el sector de La Troya, donde se dieron los últimos discursos de afecto.
Quien también estuvo ahí para despedirse fue precisamente Raúl Reinoso, quien en conversación exclusiva con “El Observador”, asegura que para él “fue todo muy repentino, es muy difícil asimilar esto”, agregando que vio una gran fortaleza en el esposo y los hijos de esta mujer: “no sé cómo Freddy pudo afrontar este momento con una sonrisa para todos”.
Por su parte, el presidente de la AFA cree que los días de consejo, que eran los lunes y jueves, van a ser los días de la semana más difíciles de enfrentar.
“Yo no quiero ni pensar cuando llegue el lunes o el jueves que nos vamos a reunir y cuando lleguemos y entremos a la oficina, ella ya no esté. Yo no creo que vayamos a encontrar a una persona como ella”, recalca una y otra vez su compañero de trabajo.
