Estudios han demostrado que ser una persona agradecida tiene múltiples beneficios para la salud física, mental y emocional, además de ser un impacto positivo para nuestro entorno
TENDENCIAS.- En la década de los 90, movimientos que promueven el bienestar emocional comenzaron a impulsar una campaña para celebrar cada 11 de enero el Día Mundial del Agradecimiento, fecha enfocada en difundir la importancia de ser agradecido con el prójimo, fomentando el bienestar y las relaciones positivas.
Ser agradecido no sólo es bueno para la otra persona hacia la que uno tiene ese sentimiento, sino también para uno mismo: tener gratitud en el corazón potencia la felicidad y evita o disminuye los estados negativos como la amargura, el rencor, el malhumor o la frustración.
Múltiples beneficios
Y esto es algo comprobado. Un estudio de 2004 a cargo de la Universidad de Pensilvania, Estados Unidos, demostró que la gratitud junto al placer, la esperanza y el amor constituyen los cuatro elementos que mayor influencia ejercen en la felicidad.
Otros estudios científicos han explorado la relación entre gratitud y salud mental. Investigaciones han encontrado que las personas agradecidas tienden a tener una percepción más alta de bienestar y menos síntomas de depresión. Modelos experimentales han mostrado cómo expresar agradecimiento regularmente puede llevar a mejoras en la calidad del sueño, niveles de energía y longevidad.
¿Y por qué sucede esto? Porque la gratitud desencadena la liberación de neurotransmisores positivos que producen una sensación de bienestar, como las endorfinas y la oxitocina. Las endorfinas actúan como analgésicos naturales y elevan el estado de ánimo. La oxitocina, conocida como la hormona del amor, fortalece los vínculos sociales y promueve sentimientos de confianza y generosidad.
Ser agradecido también ayuda a reducir el estrés y la ansiedad. Reconocer y valorar los aspectos positivos de la vida disminuye la producción de cortisol, la hormona del estrés. Además, al centrarnos en lo que nos hace sentir agradecidos, se promueve una perspectiva más optimista que combate la ansiedad.
¿Cómo celebrar el Día del Agradecimiento?
Si quieres celebrar este día, la forma es muy sencilla: simplemente expresar verbalmente o escribir por qué uno se siente agradecido hacia una determinada persona o situación. Puedes enviar un mensaje felicitando a alguna persona o escribir algo para ti mismo, agradeciendo por todo lo que has conseguido, sin necesidad de que se trate de una gran meta específica.
Si heces esto y con el tiempo lo conviertes en un hábito, podrías gozar de todos los beneficios de beneficios para la salud mental y el bienestar propio de ser una persona agradecida.
Mensajes bonitos para el ‘Día Internacional del Agradecimiento’
“Agradezco inmensamente lo que me has dado, lo que me has enseñado a ser, lo que me has permitido crecer y evolucionar. Eres un faro de sabiduría y amor en mi vida”.
“Tu generosidad y amor han obrado como destellos que han iluminado mi camino. No tengo palabras suficientes para agradecer todo lo que has hecho por mí. Eres un regalo invaluable en mi vida”.
“El verdadero significado de la gratitud es sentir que, sin tu apoyo, mi vida no sería la misma. Gracias por cada gesto, cada palabra y cada momento que has dedicado a mi bienestar”.
“El amor y la gratitud no tienen límites, pero quiero que sepas que los míos hacia ti son infinitos. Gracias por ser mi piedra angular, mi guía y mi inspiración constante, por ser parte fundamental de mi historia”.
“En cada paso de mi vida, has sido mi ancla, mi fuerza y mi paz. Gracias por tu incansable apoyo, por tu amor incondicional y por estar siempre a mi lado cuando más lo necesité”.