Un matrimonio sorpresa
Gloria De La Paz Villaroel
Conocí a mi esposo hace 21 años para un 17 de septiembre, yo era de Santiago y fui a pasar fiestas patrias a El Melón donde unos amigos de mis tíos. En el viaje mi prima chica me habló todo el camino de un chico que era rubio, simpático, “encachado”, pero su único defecto era que le faltaban algunos dientes, lo que me causó mucha gracia.
Llegamos y él estaba durmiendo, ya que había salido de fiesta y regreso en la mañana a su casa, pero en la tarde lo vi desde lejos sacando agua de un pozo con su torso desnudo y su pelo alborotado, me sorprendí y no pude dejar de mirarlo. Unas horas después nos vimos en unas carreras a la chilena en la media luna del sector, mi prima se acercó a saludarlo y fue ahí cuando nos conocimos oficialmente.
Ya en la noche, cuando regresamos a la casa de él, sus padres nos dijeron que había una fiesta en la ramada, así partimos todos para allá. Mi prima actuó de cupido y lo animó para que me sacara a bailar.
Al día siguiente nos fuimos en familia al cerro y él en su caballo me invitó a pasear por el estero donde me pidió pololeo, sin pensarlo dije que sí, ya que creía que no duraríamos mucho por la distancia.
Estuvimos juntos cuatro meses cuando él sin avisarme sacó hora en el Registro Civil para el mes siguiente, sorprendida y feliz acepté, pese a que éramos de diferentes mundos y su familia se oponía a nuestra relación.
Hoy llevamos 21 años juntos, con cuatro maravillosos hijos y cien por ciento feliz de la decisión que tomé, dejar Santiago y casarme con el amor de mi vida.
FOTO: Gloria De La Paz Villaroel y su esposo se casaron el 28 de enero de 1997
