Especialista explica que entre las razones de la proliferación de los virus estomacales que afectan a los menores de 2 años están el aumento de la temperatura y el acceso a más vegetales y frutas crudas
TENDENCIAS.- Durante el verano, el aumento de las temperaturas, junto a un mayor consumo de alimentos crudos –propios de estación- y más movilidad, producto de las vacaciones, son de los principales factores que influyen en el incremento de las afecciones estomacales en menores de 2 años en la época estival.
Según datos que aporta la pediatra de Clínica Los Leones, Dra. Mariela Fernández, alrededor de un 80% de los niños y niñas con menos de 2 años enfrentan -al menos- un episodio de gastroenteritis infantil durante el verano y, por ello, entrega algunos consejos para la prevención de los contagios y el cuidado de los niños y niñas ya enfermos.
Dentro de los síntomas más comunes que provocan estos virus altamente contagiosos están los cólicos, fiebre, diarrea y malestar general, que duran en promedio entre tres y siete días. Por lo cual, la profesional de la salud aconseja mantener a los niños y niñas adecuadamente hidratados, siempre con agua potable, embotellada sin gas, agua de cocción de manzana o sales hidratantes indicadas por un doctor.
En caso de registrar fiebre, la Dra. Fernández recomienda ir desabrigando a las y los infantes por capas y usar compresas tibias. En cuanto a la diarrea, la facultativa indica que “existe una preocupación habitual entre las mamás que es la diarrea. Sin embargo, no es posible dar medicamentos para evitarla, puesto que es parte del mecanismo para eliminar el virus”.
Por otro lado, en relación a las medidas preventivas para impedir la propagación de estos virus, la profesional reitera la importancia de realizar lavados exhaustivos a los alimentos crudos, mantener un buen aseo, en especial en verano. También, limpiar objetos que utilicen los niños y niñas, lavar frecuente de manos con agua y jabón; desinfectar superficies, beber sólo agua potable, entre otras.
La doctora Fernández cierra sus recomendaciones y señala “si hay fiebre y los padres no pueden manejarla, si el niño o niña se encuentra decaído, deben acudir a un servicio de urgencias para que sean atendidos a la brevedad”.