La PDI investigó al hijo de la adulta mayor, quien mantuvo el teléfono apagado a la hora de la desaparición, mismo teléfono que reportó robado en septiembre, cuando también le sustrajeron su camioneta
LIMACHE.- Nuevos antecedentes surgieron en la última semana tras la desaparición de María Ercira Contreras Mella, la adulta mayor que se extravió el 12 de mayo, mientras celebraba junto a su familia el Día de la Madre, en un restaurante de Limache.
Tras una disposición de Fiscalía, la investigación había estado bajo secreto por el periodo de 80 días, plazo que se cumplió el pasado 30 de noviembre, por lo que la familia de la mujer pudo acceder nuevamente a datos relevantes de la carpeta investigativa.
Y si bien hasta el momento las indagaciones aun no dan claras señales del paradero de la mujer ni de lo que ocurrió con ella, se pudo conocer que miembros del clan familiar habían sido investigados durante los últimos meses y que habían sido intervenidas sus comunicaciones.
En concreto, se investigó el hecho de que uno de los hijos de María Ercira, mantuvo el teléfono apagado mientras se encontraba en la celebración del domingo 12 de mayo y en los minutos en que la adulta mayor desapareció; mismo hijo que en septiembre denunció el robo de su camioneta y del teléfono celular, los cuales no habrían aparecido hasta el día de hoy.
Circunstancias que o pasaron desapercibidas para los investigadores, pero que por parte de la familia son rechazadas: “No son sospechas propiamente tal sobre la familia, la policía tiene un deber completo de objetividad”, comunicó al respecto el abogado de la familia, Juan Carlos Manríquez.
En este sentido, la familia de María Ercira detalla que las sospechas sobre los miembros del clan obedecen a la falta de elementos que tiene el fiscal para resolver este caso, agregando que el ente persecutor se centró “demasiado tiempo” en la línea de un posible accidente y en la búsqueda terrestre, dejando de lado la posible participación de terceros.
“La policía tiene un deber completo de objetividad y si nosotros nos querellamos en la causa y pedimos todo tipo de investigaciones y abrimos las distintas líneas de investigación, obviamente no pueden desentenderse del círculo cercano porque tienen que confirmar o descartar motivaciones de todo tipo. Entonces tienen que agotar todo porque eso fue lo que se les pidió, agotar posibles terceros, cercanos, vehículos, tráfico de teléfonos, transferencias de dineros, todo eso es lo que tienen que hacer”, detalló el abogado Juan Carlos Manríquez, respecto a la investigación hacia los miembros de la familia.
No solo familiares
Y es en este sentido, que también se conoció que Fiscalía y PDI no solo pincharon los teléfonos de los familiares, sino también de todos los trabajadores que estaban el 12 de mayo en el restaurante del Fundo Las Tórtolas, donde ocurrió la desaparición y se investiga un diálogo al que accedió la PDI, entre un trabajador del canal Waddington y el cuidador del fundo Las Tórtolas, posterior a los hechos, donde señala: “No te vayas a meter donde ocurrió la huevada”.
Además, se está investigando la comunicación vía WhatsApp que se produjo desde un número desconocido a un familiar en el mes de septiembre. En dicha comunicación, la persona que habló dijo ser un trabajador del restaurante y que tenía conocimiento que María Ercira había sido “secuestrada” por unos “sicarios” y la habían llevado al sur; agregando que se encontraba “amenazado”.
Ahora quedan varias diligencias pendientes, donde buscarán nuevas declaraciones de los familiares, el cotejo del nuevo teléfono del hijo de María Ercira y la citación para declarar al pololo de una de las nietas, debido a que también mantuvo apagado su teléfono ese día.
