Hombre busca ayuda desesperadamente para tratar enfermedad que lo tiene sin poder trabajar
LA CALERA.- Rubén García Vargas es un esforzado calerano que vive junto a su familia en la Población Baquedano y hasta hace poco más de un año, su vida era como la de cientos de sus vecinos, trabajando para subsistir y ayudar a sus padres, quienes siempre lo han acompañado, sin embargo un golpe en la pierna hizo descubrir una terrible enfermedad que ha cambiado radicalmente su manera de vivir y de relacionarse con su entorno.
Según cuentan sus padres, Rubén García y Miriam Vargas, su hijo trabajaba realizando trabajos por temporada siendo uno de los últimos el que tuvo hace un año y medio, cuando estuvo cosechando paltas en un fundo de la comuna. “Cuando estaba sacando paltas se cayó y se pegó en la pierna, después de eso se le formó una masa ahí que le fue creciendo”, relató su padre.
De ahí en más todo fue cuesta arriba para el calerano y su familia, pues con el paso de las semanas el malestar en su extremidad se fue haciendo cada vez más agudo y la masa que apareció fue aumentando en volumen hasta llegar a dificultar tareas tan sencillas como caminar y trabajar. Por tal motivo el hombre, de apenas 36 años, tuvo que comenzar a depender nuevamente de los cuidados de sus padres.
Según relata la madre, en un comienzo los médicos que lo vieron no pudieron dimensionar lo grave que era la situación de su hijo Rubén. “Cuando lo llevé al médico, el doctor dijo que era un absceso, pero mi hija me decía que no, que lo que tenía su hermano era un tumor”, se lamentó la mujer, que a día de hoy se encuentra en una búsqueda desesperada de ayuda para su hijo.
CÁNCER GRADO 4
Lamentablemente los más grandes miedos de la familia se hicieron realidad cuando los exámenes del tumor arrojaron que tenía liposarcoma, un cáncer de grado cuatro, la etapa terminal de la enfermedad, sin embargo, luego de varios meses del tratamiento adecuado, han logrado hacerlo retroceder hasta grado tres, pero aún así está lejos de terminar con la terrible enfermedad.
Hoy en día Rubén pasa sus días sumido en el dolor y en cama, según cuenta su madre. “Tiene que estar acostado de lado para que no le duela”, dice, mientras su esposo señala que la enfermedad -además de los problemas de movilidad y estéticos- le ha significado incluso sufrir discriminación en la locomoción colectiva. “Hace unos meses íbamos camino a Valparaíso al Hospital y nos echaron de la micro, porque el tumor de mi hijo despide un olor desagradable, parecido al del pescado”, dice el padre con pesar.
Para estos padres los recursos se hacen insuficientes y con dificultad logran cumplir con sus necesidades y seguir costeando la enfermedad de su hijo, es por eso que están buscando ayuda imperiosamente. “Necesitamos apósitos porque ocupa muchos y se los tengo que estar cambiando constantemente, además siempre nos falta leche, que necesita tomar”, contó la madre, quien agrega que en la municipalidad no ha encontrado el auxilio necesario, “me dan un poco de mercadería a veces, pero él tiene que comer todos los días”, se queja.
Quienes quieran colaborar con este calerano, se pueden comunicar directamente con él en el celular +569 5937 5802 y así apoyar a esta familia que tanto lo necesita.
