A 50 años del Golpe de Estado, una de las víctimas recuerda los lugares donde muchos de sus compañeros y él mismo sufrieron la represión
REPORTAJES.- Este lunes 11 se cumple medio siglo desde el Golpe de Estado de 1973, que derivó en violentos acontecimientos vividos en todo el país, los que dejaron un saldo de víctimas que asciende a más de 40 mil personas, incluyendo ejecutados políticos, detenidos desaparecidos, víctimas de prisión política y tortura.
La comuna de Quillota fue escenario de diversos crímenes de lesa humanidad, entre los que se cuentan algunos bullados casos, como el falsamente llamado “Asalto a la Patrulla”. Sin embargo, hubo otros cientos de víctimas que fueron detenidas o derechamente secuestradas y recluidas en algunos lugares de Quillota, que tal vez la comunidad no sabe que fueron centros de detención y también de tortura. Algunos de ellos son edificios ubicados en pleno centro de la comuna.
“El Observador” conversó con uno de esos detenidos, quien ahora es parte de los profesionales del Programa de Reparación y Atención Integral de Salud (PRAIS), iniciativa del Estado chileno que trabaja en la reparación hacia las víctimas de las violaciones a los Derechos Humanos ocurridas en Chile entre septiembre de 1973 y marzo de 1990. Prefiere mantener su nombre en reserva, pero cuenta que, por aquel entonces, en 1975 y con apenas 15 años, este quillotano era un destacado dirigente estudiantil en una escuela de Valparaíso.
Según cuenta, sin previo aviso, fue detenido por fuerzas de inteligencia en Limache. “Lo mío no fue una detención, fue más bien un secuestro. No había ninguna orden de un tribunal”, recuerda. Golpeado y con una capucha en la cabeza, a su corta edad supo reconocer el camino recorrido por el vehículo que lo trasladaba y sin dudarlo, sabe exactamente a qué lugar llegó. “Me llevaron a la Escuela de Caballería. Pude reconocer cuando cruzamos la línea en San Pedro y las vueltas que se dio hasta que llegamos a San Isidro”, cuenta. Dice que ahí pudo ver a la persona que lo delató. “Llevaba varios días detenido, lo vi muy demacrado, casi moribundo y a la fecha esa persona permanece desaparecida”, dice.
Sobrevivió para contarlo y con los años, dedicado al mundo de la salud, pudo conocer cientos de casos como el suyo y otros mucho peores, llevando a cabo, además, una exhaustiva investigación con el equipo del PRAIS, que le permitió conocer más sobre los lugares que fueron destinados a ser centros de detención en Quillota. Con esa información busca montar una exposición este lunes 11 de septiembre, para conmemorar los 50 años del Golpe de Estado.
Estos son algunos de los recintos de Quillota en los que cientos de personas fueron detenidas, según el relato de nuestro entrevistado y con datos ratificados por el Informe Valech.
Regimiento de Ingenieros N° 2 Aconcagua
El Regimiento de Ingenieros Nº 2 Aconcagua de Quillota, ubicado en Avenida Valparaíso s/n, entre calles Yungay, Bulnes y pasaje Lorca, estuvo a cargo del Servicio de Inteligencia Militar del Ejército y fue utilizado como recinto de detención y tortura de presos políticos.
Centro de Mujeres “El Buen Pastor”
La Cárcel de Mujeres “El Buen Pastor” de Quillota, ubicada en el acceso nororiente de Quillota, fue utilizada como recinto de reclusión de mujeres presas políticas. Muchas de ellas fueron dejadas en libertad después de un tiempo, sin ser sometidas a juicio alguno, según testimonios ratificados en el Informe Valech. En el terreno de la foto, ubicado en calle Ariztía, se encontraba este centro de reclusión.
Fiscalía Militar y Gobernación Provincial
La Fiscalía de Quillota y la Gobernación de Quillota, ubicadas en La Concepción 321, plena Plaza de Armas, fueron utilizadas como recinto de detención e interrogatorio de presos políticos de la región. A los detenidos, hombres y mujeres, se les mantenía en el salón principal, donde se les amenazaba y golpeaba. Según diversos relatos, algunos de los detenidos eran dirigidos a una oficina, donde eran sometidos a apremios ilegítimos, mientras que otros eran trasladados a otros recintos militares.
Escuela de Caballería Blindada
La Escuela de Caballería Blindada de Quillota, ubicada en el camino San Isidro s/n (actual Regimiento Granaderos) fue utilizada como centro de reclusión y tortura de presos políticos. Los detenidos eran llevados a este lugar y mantenidos en una cancha interior o en caballerizas sin abrigo. De acuerdo a testimonios, los prisioneros totalmente desnudos, amarrados y con los ojos vendados, eran sometidos a interrogatorios y torturas. Algunas de las denuncias describen golpizas que se detenían sólo con la pérdida de consciencia, además de torturas que como simulacros de fusilamientos y aplicación de electricidad. Se cree que aquí estuvieron enterradas las víctimas del falso “Asalto a la Patrulla” que aún permanecen desaparcidas: el ex Alcalde Pablo Gac; el abogado de la Reforma Agraria Rubén Cabezas y el líder campesino Levi Arraño.
Comisaría de Carabineros N°1
La Comisaría de Carabineros N°1 de Quillota, ubicada en calle Chacabuco N°481, lote 1, entre las calles Pinto y San Martín, fue utilizada como centro de detención de presos políticos. Los relatos y denuncias señalan golpizas a los detenidos al interior de un calabozo de 3×3 metros, sin alimento ni abrigo, donde eran interrogados y golpeados.
Cárcel de Quillota
La antigua Cárcel de Quillota, ubicada en calle San Martín N°120, esquina Chacabuco, lote N°2, a cargo de Gendarmería de Chile, fue utilizada como centro de detención de presos políticos en la región. Los prisioneros eran incomunicados por largos períodos en calabozos húmedos y sometidos a violentas golpizas. Los hechos se realizaron en un edificio anterior al que aún existe en calle Chacabuco.
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