Instalación de scanner para registro de encomiendas y circuito cerrado de televisión son las principales medidas
LOS ANDES.- Gendarmería realizó una inversión superior a los $180.000.000 en la adquisición de diversos implementos tecnológicos para robustecer la seguridad del Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de Los Andes. Esto ha permitido que en los últimos meses hayan aumentado el decomiso de elementos prohibidos en el establecimiento penitenciario.
El millonario monto permitió la compra de un sistema XIS 6040 de inspección por rayos X (scanner) y la conformación de un circuito cerrado de televisión. Este último cuenta con 66 cámaras, entre ellas: 32 minidomo, once fijas Bullet, cinco domos y siete móviles PTZ IR, etc. Además, toda la línea de fuego cuenta con sensores de movimientos. En caso de detectarse algo irregular en el sector los sensores emiten una señal, ésta es recepcionada por las cámaras de seguridad e inmediatamente muestran el punto exacto donde se registró la anomalía.
El jefe del CCP andino, comandante Cristián Farías Vásquez, sostuvo que “el alto mando hizo algunas inversiones, tanto en mejoramiento como en remodelaciones del sistema de cámara de la unidad. Se incorporaron cámaras fijas como domos a diferentes partes del recinto, tanto interno como perimetralmente. Además, se hizo una inversión en una máquina radiscann, que son las mismas que se ven en los aeropuertos”.
“Esto nos permite trabajar acorde a las nuevas tecnologías que están a disposición del servicio, apoyar al personal que trabaja al interior en la labor de vigilancia de la población penal y a la guardia armada que realiza labores de centinela en el perímetro. Hoy en día el CCP de Los Andes está en un instancia de modernización tecnológica, de vigilancia y seguridad, que nos permite mejorar nuestra función”.
En cuanto a los resultados de estas medidas, el comandante Farías destacó que “el año pasado hubo varias incautaciones en ciudadanos o ciudadanas que intentaron ingresar algún tipo de ilícitos, por lo general drogas. Esto a través de un trabajo de inteligencia que se hizo con personal de la OSI (Oficina de Seguridad Interna) y personal de trato directo de la guardia interna”.
A estas medidas se sumará, durante el presente mes, la instalación de una chapa biométrica en la sala de armas de la unidad, esto con la finalidad de llevar un control automático de los funcionarios que ingresen a esta dependencia.