Decisión adoptada por la autoridad ambiental, a raíz de la crisis hídrica que afecta a la zona, fue la causa de esta desvinculación.
LA CALERA.- Hace unas seis décadas se levantó en Artificio la planta de algas marinas conocida como Algamar. En ese entonces, el sector era un territorio compuesto por amplias parcelas, donde el río fluía enorme y durante casi todo el año.
Su producción de Agar Agar, derivado de las algas marinas, se exportaba a muchos países del mundo, siendo un producto que se ocupaba en múltiples procesos para fabricar alimentos, cosméticos y medicamentos, entre otros.
Sin embargo, el territorio donde actualmente se ubica la planta comenzó a cambiar y las casas comenzaron a surgir por todos lados. Además, la sequía y el cambio climático prácticamente hicieron desaparecer el agua del río.
De esta manera, los drásticos cambios modificaron totalmente la realidad hídrica de la zona y rebajaron ostensiblemente la disponibilidad de agua, la cual era fundamental para los procesos de producción de la empresa.
En este contexto, y a través de un comunicado, la gerencia de la planta informó que, dada la crisis económica actual y en el ejercicio de las potestades que les confiere la ley, “las autoridades con competencia ambiental han determinado, oficialmente, que ya no existe un caudal de dilución disponible en el río Aconcagua que permita el ejercicio de las actividades productivas tales como las que realiza Algas Marinas S.A. Algamar en la comuna de La Calera“.
“Esto imposibilita a nuestra empresa continuar con los procesos productivos, en particular con los que requieren una gran cantidad de agua y, en general, un gran volumen de descarga de residuos líquidos industriales al casi inexistente curso de agua del río Aconcagua”, detallaron desde la compañía.
Desvinculación masiva
Esta situación obligó a la empresa a tomar medidas complejas, como detener toda su producción en el área húmeda y desvincular a los trabajadores que se desempeñaban en dicho sector.
La dotación de la planta, que correspondía a unos 250 colaboradores, debió rebajarse en 113 personas. El jueves 10 de octubre se les notificó, mientras que el viernes siguiente-con presencia notarial- se hizo oficial la desvinculación.
Sin embargo, Algamar S. A. seguirá en su planta de Artificio, aunque solo con lo que corresponde a su área seca y comprando a proveedores el Agar Agar que necesitan para cubrir sus compromisos con mercados internacionales.
La empresa lamentó tener que adecuarse a la nueva realidad y los ajustes de personal, “agradeciendo la comprensión de los colaboradores que han sido afectados”, señalaron en el comunicado.